Partizán, el fútbol a flor de piel: historia y presente de la nueva casa de Joao Grimaldo

Después de cuatro temporadas y media en Sporting Cristal, Joao Grimaldo dio el salto que tanto estaba esperando y consiguió emigrar al fútbol europeo para buscar la tan ansiada consolidación de su prometedora carrera. Cuando muchos esperaban que se fuera a algún equipo de Argentina, Turquía o Portugal, su destino terminó siendo el Partizán de Belgrado, uno de los dos clubes más importantes y tradicionales de Serbia. Dicho país tiene la fama de vivir este deporte de manera muy visceral, con los hinchas afrontando cada partido con una pasión desenfrenada y asumiendo algunas derrotas con violencia, como ha sucedido en más de una ocasión en el Derbi Eterno contra Estrella Roja, su rival de toda la vida.

‘Grima’ tendrá adaptarse a un contexto muy diferente al de donde proviene, asumir esa exigencia con mucha responsabilidad y así hacerse el camino para que su paso por Serbia sea el trampolín hacia una competición con más reflectores en Europa. Por lo pronto, Partizán es su nueva casa y deberá conocerla como la palma de su mano para afrontar esta primera temporada fuera del Perú como algo más que un espacio para su adaptación. ¿Qué sabemos blanquinegros, por qué su historia tiene mucho arraigo político y qué otros sudamericanos defendieron sus colores en los últimos tiempos?

Una mirada hacia el pasado

Como la mayoría de clubes fundados en Europa del Este, Partizán tiene sus orígenes militares gracias a sus fundadores históricos, quienes formaban parte del Ejército Popular Yugoslavo y representaban a la defensa del jefe de Estado croata, Josip Broz Tito. Fundado un 4 de octubre de 1945, años después de la caída de la Alemania Nazi, recibió el nombre de Partizán en conmemoración de los partisanos que habían estado en el campo de batalla enfrentando a los invasores alemanes durante la Segunda Guerra Mundial. No fue hasta 1950 en que se convirtió netamente en un club de fútbol, ya que previamente había formado parte de una sección deportiva del ejército.

Partizán compitió en la Primera Liga de Yugoslavia hasta 1991, levantando su primer título en la temporada 1946-1947 y cerrando su participación hasta entonces en 11 trofeos ligueros. Posteriormente, tras la disolución de Yugoslavia, la ‘Apisonadora’ ganó ocho veces la Primera Liga de Serbia y Montenegro, para luego, con la Superliga de Serbia ya establecida, registrar ocho títulos locales más. En total fueron 27, además de las 16 Copas Nacionales y una Supercopa de Yugoslavia.

En lo que respecta al plano internacional, aprovechando a la que hasta la fecha se le conoce como su generación dorada, Partizán alcanzó la final de la Copa de Campeones de Europa –hoy conocida como la Champions League– de la temporada 1995-96, enfrentándose al Real Madrid en la gran final. En un Estadio Heysel de Bruselas con más de 55 mil almas, el conjunto yugoslavo llegó hasta el minuto 70 con el 1-0 en el marcador y estuvo muy cerca de tocar la gloria, pero finalmente los españoles remontaron el partido y levantaron el que hasta entonces fue su sexto trofeo continental. Aquella final sigue siendo un hito en la historia del club.

Un clásico ‘picante’

La ciudad de Belgrado tiene en el clásico entre Partizán y Estrella Roja, a uno de los enfrentamientos más apasionantes y peligrosos del fútbol europeo, sobre todo por la pasión encarnizada en la que se enfrascan ambas hinchadas cuando están cara a cara. Este encuentro, conocido como el Derbi Eterno, tiene una rica historia y una rivalidad que va más allá de lo deportivo, pues se remonta a la fundación de ambos clubes en 1945, con profundos condimentos políticos, sociales y culturales que hasta ahora existen en Serbia.

Este compromiso no solo define la supremacía en Belgrado, sino que muchas veces suele tener repercusiones importantes para el desenlace de la Superliga de Serbia o la Copa Nacional. Es común ver que este partido, además de regalarnos estadios llenos y tifos espectaculares, esté cargado con una atmósfera de mucha hostilidad y lamentablemente eso ha llevado a que cuente con un largo historial de hechos de violencia. Si líneas arriba destacamos que Partizán estuvo cerca de ser campeón europeo en 1966, Estrella Roja sí logró colocarse una estrella continental en su escudo al ganar la Copa de Europa de 1991, donde venció en la final al Olympique de Marsella en tanda de penales (5-3).

Desde que se estableció la Superliga de Serbia en la temporada 2005-06, Estrella Roja ha levantado 10 de los 18 títulos ligueros que han estado en disputa, mientras que Partizán se quedó con los ochos restantes. Esto habla de una marcada supremacía de estos dos equipos con respecto al resto de instituciones, un contexto que aviva aún más el fervor que hay detrás de este clásico. El mayor tiempo de superioridad de los blanquinegros en los últimos años se dio entre la campaña 2007-08 y 2012-13, donde se coronaron en seis oportunidades de manera consecutiva.

No obstante, los rojiblancos han sido invencibles desde el curso 2017-18 hasta la más reciente temporada, campeonando siete veces al hilo. En ese lapso de tiempo Partizán quedó como escolta en cinco ocasiones, incluyendo en la 2023-24, cuando fueron relegados al segundo lugar con 18 puntos menos que Estrella Roja. Precisamente esta sequía de la ‘Apisonadora’ ha llevado a que los hinchas sean más exigentes año tras año, con el único objetivo de volver a adueñarse de la Superliga de Serbia y cortar la racha de su clásico rival. Joao Grimaldo vivirá su primer Derbi Eterno el próximo sábado 21 de septiembre, cuando su equipo sea local por la novena jornada del campeonato liguero.

Los 18 títulos de la Superliga de Serbia divididos entre el Derbi Eterno.

Una oportunidad para Joao

De las veinte grandes ventas que hizo Partizán a lo largo del último siglo, 13 fueron serbios, cuatro montenegrinos, dos brasileños y un nigeriano. Esto quiere decir que no es muy habitual que pasen sudamericanos por este equipo, ya que incluso en el plantel de la presente temporada solo hay dos de esta parte del mundo: Joao Grimaldo representando a Perú y Matheus Saldanha a Brasil. Durante el curso pasado también estuvo el ecuatoriano Denil Castillo, aunque su contrato solo fue una cesión por seis meses desde el Shakhtar Donetsk, adonde volvió para posteriormente ser vendido al Midtjylland de Dinamarca. El colombiano Andrés Colorado pasó por el club en la campaña 2022-23, igualmente por medio año.

Cléverson Gabriel Córdova, mejor conocido como Cléo, es uno de los sudamericanos que mejor recuerdos dejó en Partizán en el último tiempo. Pese a que fue llegó desde Estrella Roja y tuvo esa estigma de haber pasado por el clásico rival, a punta de goles se ganó el cariño de la hinchada y fue clave en la consecución del título de la Superliga de Serbia 2009-10. En total, en los 63 compromisos que disputó en el club, marcó 40 tantos y sirvió 12 asistencias. El brasileño solo estuvo dos años en el equipo, ya que fue vendido al Guangzhou Evergrande por 4 millones de euros.

Otro de los brasileños en esta nómina es Leonardo da Silva Souza, pero su paso por Partizán fue breve y se le recuerda más por los 4 millones de euros que dejó su transferencia al fútbol de Arabia Saudita, para jugar por el Al Ahli. Evidentemente estos datos no determinarán el futuro de Joao Grimaldo en el fútbol de Serbia, ya que el mercado es muy cambiante y estamos hablando de ventas que se dieron hace varios años atrás. El exjugador de Sporting Cristal contará con oportunidades para mostrarse y deberá estar preparado para cuando le toque ser titular, si es que su entrenador Aleksandar Stanojević así lo considera.

Precisamente el pasado sábado, antes de que Joao hiciera su debut oficial en el triunfo por 2-0 sobre el FK Železničar, Stanojević destacó su compra y lo que esperan de él de aquí en adelante. “Grimaldo es un chico extremadamente joven, vino de otro continente, ya ha demostrado algunas cosas en los entrenamientos. Nosotros somos partidarios de traer jugadores más jóvenes y ahí es donde arriesgaremos, creemos que nos aportará algo”, comentó en conferencia de prensa. Recién llegado y con un proceso de adaptación por cumplir, ‘Grima’ tiene las condiciones para destacar en Partizán. Está en sus pies demostrarlo en el campo de juego.

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