Luego de su separación del primer plantel de los Xolos de Tijuana de México, por indisciplina, el mediapunta ecuatoriano Miler Bolaños adelantó que no volvería al Barcelona Sporting Club, con el que debutó como profesional en el 2006.
Durante un diálogo con la radio quiteña Cobertura le consultaron a Bolaños si había recibido una propuesta para volver a defender a los canarios y ocupar el lugar de Fidel Martínez, quien fue transferido al Shanghai Shenhua de la Superliga China, y respondió: “A Barcelona no regresaría, negado, siempre están las puertas abiertas para cualquier equipo, menos para Barcelona. Totalmente negado mi llegada a Barcelona”.
Ante esto, Carlos Alejandro Alfaro Moreno, actual presidente de los toreros, dijo al programa Fútbol bohemio, que se transmite por YouTube, que “Barcelona no estuvo interesado en Bolaños ni lo está ni lo estará”.
La historia de Bolaños en el cuadro amarillo estuvo marcada por un final gris. El 25 de octubre de 2007, luego de recibir los exámenes de la contraprueba de un laboratorio de Chile se confirmó que “el futbolista dio positivo”, indicó Rómulo Aguilar, quien era el presidente de la Comisión Médica de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).
Fue suspendido un año en primera instancia, pero luego apeló y solo cumplió seis meses, regresó a las canchas el 21 de mayo de 2008. A finales de esa temporada fue transferido a Liga de Quito; Miler, en la radio quiteña Cobertura, reveló: “Llegó el DT Benito Floro y dio una lista de los jugadores que no íbamos a estar en el club. A los jóvenes les digo que el fútbol ha cambiado y se tiene la posibilidad de debutar muy jóvenes y que siempre luchen por sus sueños”.
Con los albos, el volante fue campeón de la Copa Sudamericana 2009; la Recopa Sudamericana y campeón nacional -siendo figura en esta última al marcar dos goles en la primera final ante Emelec-, ambos en el 2010.
Su exitoso paso por la ‘U’ sirvió para ser transferido a las Chivas USA de la MLS en el 2012 y para el 2013 retornó al balompié nacional para militar en Emelec, club con el que dio tres vueltas olímpicas -2013, 2014 y 2015, en las dos últimas fue figura-. En la segunda final, jugada contra Barcelona, marcó un doblete en la victoria 3-0 (marcador final de 4-1).
En el 2016 fue vendido a Gremio de Brasil, donde ganó el título de la Copa Brasil en ese año; no se logró consolidar y pasó a los Xolos de Tijuana de México en el 2017. (D)