Doryan Jara, expresidente de la Asociación de Fútbol del Chimborazo (Afnach), calificó como falta de conocimientos por parte del actual titular del organismo provincial, Gustavo Torres, en las acciones que tomó en contra del CD Olmedo y que lo llevó a declarar en acefalía al directorio presidido por Mayra Argüello y a nombrar una Comisión Interventora, esto en declaraciones que realizó al portal ADN Noticias de Riobamba.
El directivo señaló que no se puede hablar de acefalía, como argumenta la Afnach, ya que “el directorio, les guste o no, está en funciones, incluso es reconocido por la FEF y la LigaPro, por eso las comunicaciones llegan a nombre de quien está presidiendo el club (Mayra Argüello). Afnach no puede ser juez y parte. El presidente de la Afnach no vio las consecuencias de todo lo que se hizo. No sé de dónde sacan esa Comisión Interventora. En el reglamento no se habla de que debe haber una Comisión Interventora y quizás por la euforia el presidente de la Afnach sale a decir a los socios que en tres semanas ya se tendrán buenas noticias para el club lo que es prevaricar, porque ya da un juicio de valor sobre lo que va a suceder”.
Jara añadió que se habla de una deuda pendiente del CD Olmedo con la Afnach, aunque el camino a seguir era que se notifique a la FEF para que le dé plazo y cancele, “pero eso no es causal para intervenir al club”.
El exdirectivo indicó que se comete un error jurídico, porque la intervención no consta en los estatutos de la Afnach. Pero eso sí, “me causa muchísima admiración porque siempre son los mismos personajes los que realizan sus pronunciamientos a conveniencia de alguien. En mi época (2010-2018) hubo un problema similar, pero ahora el abogado Guillermo Saltos Guale (jurídico de la FEF) manifiesta que no se metan con la autonomía que tiene un club cuando la Asociación le hace una observación; pero resulta que ese discurso no aplicó para nosotros, porque nos aplicaron elecciones, junta interventora. Para mí debe dejar una lección muy clara a toda la dirigencia local, porque vemos que no hay independencia”, comentó.
Jara insistió en que “en ninguna parte el Estatuto de la Afnach establece que es obligación de un club invitar a sus elecciones a la Asociación. Los clubes son completamente autónomos tanto administrativamente como económicamente. Se ha resquebrajado la relación entre la Asociación y el club y la única obligación que, este caso, tenía la Asociación era de informar a la FEF que se eligió un nuevo directorio”.
Quien además fue el primer comisario de juego de Chimborazo del Campeonato Nacional añadió que los dirigentes no solo se hacen, sino que deben presentar su hoja de vida, “y es importante que un dirigente tenga logros en su actividad dirigencial y no como se han dado casos de que nunca han ganado absolutamente nada y ahora resulta que son los amos, dueños y señores del fútbol de muchas provincias”.
El también exdirectivo y exjugador del Star Club de Riobamba señaló que todavía no puede entender el litigio que se vive dentro del directorio de la Ecuafútbol, “ustedes recordarán que hace un tiempo, quienes ganaron las elecciones eran parte de un equipo de trabajo que lo lideraba Francisco Egas y también estaba Jaime Estrada. Tenían un directorio, pensamos consolidado, ahora resulta bastante extraño que no hayan podido consensuar su propuesta inicial para tratar de fortalecer el fútbol ecuatoriano y brindarle un manejo completamente diferente del que se venía dando. La verdad que por el bien de la FEF deben limar asperezas o dar la razón al que la tiene y trabajar en beneficio del fútbol profesional que tanta falta nos está haciendo”.
Al referirse a los cheques que aparecieron girados por el actual presidente de la FEF, Francisco Egas, por 24 000 dólares a favor de cuatro clubes, Jara indicó: “En los ocho años que fui dirigente nunca se manejaron tantos intereses como hoy. Estar en la dirigencia es un privilegio para aquellos que tienen la vocación de servir por medio de una institución deportiva, pero también hay del otro lado, de aquellas personas que han lucrado claramente por su institución, por su club, por su Asociación. Hoy se conoce sobre la asistencia de la Conmebol por la emergencia sanitaria, los derechos de televisión. Cuando yo dirigí la Afnach no recibíamos recursos, ahora es totalmente diferente”.
Quien estuvo como dirigente deportivo a nivel provincial y nacional por cartorce años reconoció el trabajo que desplegó el expresidente de la FEF Luis Chiriboga y resaltó las clasificaciones a tres mundiales de fútbol, la infraestructura que dejó en Quito y Guayaquil. “Lamentablemente, esta gestión se vio empañada por los escándalos del Fifagate, tuvo un error y pagó una condena; luego, cuando llegamos al periodo del ingeniero Villacís (Carlos) se retrocede muchísimo, ya que prácticamente la FEF se vuelve una institución sin cabeza, no se puede hablar de buenos resultados y más bien siempre se pudo ver el compadrazgo que había. Yo tuve serias confrontaciones con él y por eso me vi obligado a renunciar a mis funciones como comisario de juego”. (D)