Luis Abramovich, fue un marcador derecho argentino que jugó 200 partidos con la camiseta de Boca Juniors. Además, ganó la Supercopa Masters y hasta la fecha es muy recordado en la Bombonera. Cabe resaltar, que en 1991, fue parte del Colo Colo 3-1 Boca Juniors, siendo estos uno de los partidos más polémicos en la historia de la Copa Libertadores. Ese día, un perro mordió a Navarro Montoya y los chilenos terminaron clasificando a la final.
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El ex marcador de punta, habló con Líbero sobre el momento sublime que vive Luis Advíncula, a quien considera un gran jugador y que ya forma parte de la historia boquense.
¿Qué opina del rendimiento de Luis Advíncula?
Advíncula está en un gran nivel. Creo que Almirón también lo ha aprovechado de buena manera, tanto de defensor como de extremo, o de carrilero en línea de cinco.
Se dice que el Negro Ibarra es el mejor lateral derecho de la historia de Boca. ¿A cuántos escalones está Advíncula de alcanzarlo?
Cuando ganas torneos te vas posicionando, pero si te toca ganar la Copa Libertadores no hay ninguna duda que te metes entre los mejores laterales derechos más importantes de la historia de Boca.
¿Y si no la gana?
Aún si no la gana, créeme que en la retina del hincha ya quedó las actuaciones que ha tenido Advíncula en esta Copa Libertadores, ha jugado una barbaridad y su entrega ha sido total. Nada que reprocharle.
¿Le sorprende que ha hecho goles importantes?
No nada que ver, pero también hay que recalcar que antes la pelota pesaba más, y rematar de larga distancia era más complicado que ahora, en la actualidad la pelota pesa menos.
¿Advíncula puede destronar al Negro Ibarra como el mejor lateral derecho de la historia de Boca?
Creo que el Negro Ibarra seguirá arriba por todo lo que ganó. Ahora, si Advíncula gana la Libertadores y luego gana el mundial de clubes, créeme que ahí podrá pelear cabeza a cabeza con el Negro Ibarra. Jajaja.
¿Siente que se le infravalora para resaltar a otros jugadores locales?
No nada que ver, si lo dices por el Colo Barco es un caso distinto. El Colo será una figura del fútbol mundial. Es joven, regatea, viene de las inferiores y tiene unas cualidades tremendas, todo eso tiene un valor extra para la gente. Pero a Advíncula no se le infravalora.
¿Se mantiene firme en que es necesario ganar una Libertadores para entrar entre los grandes?
Te cuento mi caso, yo estuve cerca de ganar la Libertadores en el 91, cuando perdimos la semis con Colo Colo, un partido de escándalo donde ocurrió el tema de los perros que nos atacaron, etc. Lamentablemente no pudimos ganarla. Hoy en día, la gente me recuerda mucho, pero soy consciente que para quedar más en la historia tienes que lograr una Libertadores.
¿Llegó a ver jugar a Julio Meléndez?
No nada, me hubiera gustado verlo. Se por las personas que lo vieron, que era un crack peruano, pero lamentablemente yo no lo pude ver.
¿Qué opinión tiene de Barros Schelotto?
Su paso no fue malo, solo que hay esa manchita de la final en Madrid, como que en ese momento terminó su historia. La gente solo lo recuerda por esa final, pero nadie se acuerda que hasta el minuto 70 Boca iba ganando 1-0.
Ahora que será DT de Paraguay, y ellos enfrentan a Perú, ¿cómo cree que le vaya?
Es un entrenador con un estilo muy directo, algo así como cuando él era jugador. Perú no la va a tener fácil con Paraguay, será un duelo interesante entre Reynoso y Schelotto. El estilo de Guillermo los puede ayudar en esta eliminatoria.
¿Cree que Zambrano pudo dar más en Boca?
Creo que Zambrano dio todo lo que tenía que dar. Acá su rendimiento fue bastante bueno. Tenía esos problemas con los brazos, algo parecido a lo de Rojo, ahora con el VAR todo eso te complica. Pero me a mí me encantaba Zambrano.
¿Cómo se siente al ver que Advíncula y Weigandt, un chico que usted dirigió se ha compenetrado bien en la banda derecha cuando lo decide Almirón?
Almirón ha gestionado bien al usar a Weigandt y Advíncula juntos. Justo a Weigandt yo lo tuve en las juveniles de Boca.
¿Cómo le fue en las inferiores de Boca?
Bien, fue bastante bueno. Ahí desarrollé un programa de entrenamientos personalizados en forma sistémica , que pude implementar en juveniles mayores y en la tercera división. Yo fui el creador, lo llamé "Sebra" ( por mi hijo Sebastian Abramovich que me ayudó a lograrlo ). Uno de los que fue parte de ese programa y creció mucho, fue Nahuel Molina, que fue campeón del mundo con la selección.