A poco de comenzar el Mundial Sub-20 en Argentina, comenzaron los problemas porque la Selección de Irak ha sido envuelta en un escándalo que podría repercutir hasta temas legales. La mañana del jueves, salió a la luz una acusación de presunto abuso sexual hacia un empleada de hotel en La Plata, localidad donde concentra el plantel con miras a su participación.
La mujer, cuyo nombre no trascendió, reveló que el futbolista tocó sus partes íntimas sin consentimiento. Su reacción a los gritos apenas ocurrió requirió de la intervención de agentes del Ministerio de Seguridad Bonaerense, personal del hotel, del consulado y de la FIFA.
Esta situación tuvo lugar en el Hotel Dazzler, edificio que abrió sus puertas en 2022, a fines de noviembre. El lugar se encuentra ubicado en el centro de la capital del país, Buenos Aires. Por ahora, no se ha llevado la situación hacia el plano legal.
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No habrá denuncia
De acuerdo a información de El Editor Platense, el jugador iraquí no ha sido detenido y solo fue advertido por su conducta: la reunión entre el órgano que gobierna las federaciones de fútbol y las partes involucradas determinó que ninguna de las dos identidades se dieran a conocer.
Además, se ha pedido que se tome como “un error del futbolista” para que no haya una denuncia que pueda complicar su estadía en el país sudamericano. Sumado a ello, no quieren que el conflicto pase a mayores para no perjudicar la organización del evento deportivo.
A su vez, personal del hotel también reveló comportamientos indebidos por parte de los iraquíes, como moverse por los pasillos y la recepción en ropa interior, activar el sistema de alarma de incendios a propósito y romper un ascensor por sobrepeso, entre otros desmanes.
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