Como en la vida misma, las figuras del fútbol mundial pueden transitar en polos opuestos. De pasar de la tristeza a la real alegría. Esto le pasó, en 2018, al arquero de la Selección de Argentina Emiliano Martínez, que en un momento de su carrera dejó de "amar al fútbol", tal como lo anunció en una entrevista con el diario Olé. Ya no encontraba un norte. Se encontraba a préstamo en Getafe y el entrenador de ese entonces, José Bordalás, no lo consideraba. Lo borró de tal manera que el argentino pensó en tomar sus maletas y viajar a Londres, a pesar que tenía contrato vigente con el equipo español.
Martínez llegó a Getafe cedido por el Arsenal luego de no consolidarse en equipos como Oxford United, Sheffield Wednesday, Rotherham, Wolverhampton Wanderers y Reading. Ya no era un chico y su carrera no despegaba. Sin embargo, 'Dibu', apodo que recibió por un dibujo animado, recibió el respaldo de su familia. Un envión anímico clave para dar un giro de 180 grados en su futuro.
En la temporada 2019-2020 retornó al Arsenal para jugar 9 partidos en la Premier y 6 en la Europa League. El rendimiento del hincha confeso de Independiente de Avellaneda despertó el interés del Aston Villa, que no dudó en ficharlo por 17 millones de euros. El resto es historia. En 'Los Villanos' encontró su lugar en el mundo y alcanzó a la vez un rendimiento óptimo que lo trasladó a la Selección de Argentina. Sí, Emiliano, al igual que Lionel Messi, acaba de ser la figura de la 'Albiceleste' para eliminar a los Países Bajos con una actuación que emuló a Sergio Goycochea.