Boca Juniors superó a Talleres desde el punto penal en la final de la Copa Argentina y se coronó campeón. Luego del 0-0 en los 90 minutos, Agustín Rossi dijo presente nuevamente y atajó un remate para llevar al equipo de Battaglia hacia un nuevo título.
Rossi fue la figura del campeón. El arquero, cuestionado durante la temporada por algunos fallos puntuales en encuentros decisivos, demostró otra vez su capacidad para atajar penales ante Talleres en la final. Su racha positiva había comenzado en la Copa de la Liga, certamen en el que atajó dos remates ante River Plate y uno ante Racing Club.
En Copa Argentina, Boca solamente recibió un gol en seis partidos. En tres ocasiones finalizó 0-0 en tiempo regular y definió desde el punto penal. Allí apareció la figura de Agustín Rossi. El arquero se lució, en primer lugar, ante River Plate en octavos de final. Se lanzó hacia su derecha ante el disparo de Julián Álvarez y desvió el balón. En la siguiente fase, ante Patronato, nuevamente apostó por su costado derecho para evitar el gol de Marín.
Ante Talleres, la 'derecha de la suerte' volvió a ser la clave ante Fértoli para empezar el camino al campeonato. Sus compañeros no fallaron en los cinco remates y Boca gritó campeón otra vez en la Copa Argentina.