Si se piensa en Diego Maradona, además de sus impredecibles jugadas sobre un campo de fútbol, es fácil recordarlo por sus frases. Polémicas o no, ha sido ingenioso para enunciar cada una de ellas y, a un año de su partida, serán difíciles de olvidar.
A lo largo de los calendarios y con muchas etapas en su singular vida, fue reflejando con palabras cada una de esas fases. Desde sus primeros triunfos, su consagración con la selección de Argentina, hasta sus últimos días como futbolista y su relación con experiencia dirigiendo a la Albiceleste.
“Ganarle a River es como que tu mamá te venga a despertar con un beso a la mañana”. Ídolo e hincha de Boca Juniors, nunca ocultó sus colores y, como era de esperarse, las rivalidades en el fútbol las inmortalizaba de esta manera.
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“¿Cómo hice el gol? Lo hizo la mano de Dios”. Tal vez uno de los momentos más recordados en su carrera tras anotar el primer gol que le diera el Mundial de México 1986, con la mano. Su respuesta quedó en la historia, al igual que el segundo tanto de aquella jornada también.
“Si muero, quiero volver a nacer y quiero ser futbolista. Y quiero volver a ser Diego Armando Maradona. Soy un jugador que le ha dado alegría a la gente y con eso me basta y me sobra”. Lo dijo en 1992 y con ello dejaba en claro que entendía el efecto que tuvo en la gente, para bien o para mal.
“Me cortaron las piernas”. “No quiero dramatizar, pero créeme que me cortaron las piernas”, dijo en 1994, cuando la FIFA le impidió jugar el Mundial de EE. UU. aquel año tras dar positivo a efedrina y otras sustancias prohibidas.
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“Te lo juro por la Dalma y la Giannina”. Palabras que repitió una y mil veces tras el nacimiento de sus primeras hijas, en 1987 y 1989, respectivamente; ambas con Claudia Villafañe.
“La pelota no se mancha”. Palabras que ‘El Diego’ inmortalizó en 1997, tras su breve regreso a Boca Juniors. Luego de un partido de despedida, reconoció sus errores, pero defendió al deporte que lo hizo grande. “El fútbol es el deporte más lindo y más sano del mundo. Yo e equivoqué y pagué, pero la pelota no se mancha”.