Las primeras semanas del Mundial Qatar 2022 estuvieron marcadas por las grandes sopresas. Una de las selecciones que destacó fue Japón: le arrebató el primer lugar del grupo E a España y eliminó a la poderosa Alemania. Si bien el conjunto nipón cayó en octavos de final ante Croacia, hace varios años vienen compitiendo al máximo nivel y tienen proyectado ser campeones del Mundo en el 2092. ¿Cómo así?
Pese a no ser un país tradicionalmente futbolístico, los Samuráis Azules tomaron muy en serio un proyecto deportivo que los ponga a la par de escuadras como Brasil, Francia y demás. Para lograrlo, se realizaron una serie de cambios estructurales y, siempre, con el objetivo de ganar la Copa del Mundo.
Proyecto de Japón para ganar el mundial en el 2092
Todo arrancó a inicios de los 90. En aquel momento se creó la Liga de Fútbol Profesional de Japón (J-League) y la selección japonesa se consagró por primera vez en su historia en la Copa Asiática de 1992 tras vencer a Arabia Saudita por 1-0.
De ese momento, las reglas cambiaron y se adoptaron una serie de medidas. Para empezar, se rompió la dependencia que tenían los clubes de los patrocinadores, se estableció la creación de estadios con un aforo mínimo de 15.000 espectadores y el torneo comenzó a disputarse en varias ciudades. Además, el certamen se transmitió por señal abierta para incrementar su popularidad.
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A estas directrices se le añadieron la llegada de grandes figuras para ayudar a la masificación del deporte. En ese sentido, el delantero Zico fichó en 1991 por el Kashima Antlers, mientras que el inglés Gary Lineker fue contratado por el Nagoya Grampus Eight en 1992.
Los resultados no tardaron: Francia 1998 significó la primera participación de Japón en una Copa del Mundo. A pesar de no sumar puntos, los nipones colocaron su nombre en los grandes torneos. En la siguiente edición, la cual organizaron junto con Corea del Sur, alcanzaron los octavos de final.
Después de participar en Alemania 2006 (fase de grupos), Sudáfrica 2010 (octavos de final), Brasil 2014 (fase de grupos), Rusia 2018 (octavos de final) y Qatar 2022 (octavos de final), el proyecto llegó a un punto más que interesante. Si consideramos las últimas dos ediciones, Japón pudo competirle, de igual a igual, a candidatas como Bélgica, Alemania y España.
Sin embargo, un aspecto a remarcar fue el trabajo en divisiones menores y la cantidad de jugadores presentes en el balompié europeo. A diferencia de otros años, futbolistas como Ritsu Doan (Friburgo), Takuma Asano (Bochum), Daichi Kamada (Eintracht Frankfurt) e Hiroki Ito (Stuttgart) son algunos de los nombres que militan en la Bundesliga.
El plan de Japón viene evolucionando de manera considerable a todo nivel y la inversión en el fútbol es mayor. En varias ocasiones fueron sedes del Mundial de Clubes y todo gira en torneo al objetivo principal: obtener la Copa del Mundo en el 2092, año en el que se cumplirá el centenario de la J-League.