La Bundesliga ha tenido este jueves un fin de mercado de fichajes sin sobresaltos y sin grandes operaciones, una vez que los principales equipos se movieron oportunamente para confeccionar sus plantillas
El Bayern, que ha tenido las bajas de Robert Lewandowski -al Barcelona por 45 millones de euros-, Niklas Süle, Tanguy Nianzou y Corentin Tolisso, entre otros, ha incorporado a Sadio Mané, Matthjis De Light, Matthys Tel, Noussair Mazraoui y Ryann Gravenberch.
En total el Bayern ingresó 104 millones de euros y gastó 137 millones en este mercado de verano, según cifras oficiosas.
El fichaje más destacado ha sido el de Mané. El más caro el de De Light. La marcha más notable ha sido sin duda la de Lewandowski.
El subcampeón alemán, el Borussia Dortmund, traspasó al Manchester City a Erling Haaland en lo que fue la operación más destacada en el capítulo de salidas.
De otro lado, fichó a Niklas Süle, a Nico Schlotterbeck, procedente del Friburgo, a Sebastian Haller -que está reconvaleciente tras ser tratado de un tumor malingo- Anthony Modeste, Jamie Byone-Gittens y Salih Özcan.
El Dortmund gastó un total de 91 millones de euros y tuvo ingresos por 79 millones.
Para el RB Leipzig lo más importante ha sido el regreso de Timo Werner, por quien pagó 20 millones al Chelsea, y la incorporación del lateral David Raum, procedente del Hoffenheim, por 26 millones de euros.
El capítulo de salidas fue amplio. En total el Leipzig gastó 58 millones de euros e ingresó 75,5 millones.
Para el Bayer Leverkusen lo más importante ha sido la incorporación, en calidad de cedido, de Callum Hudson-Odoi. En cuanto a salidas destaca la del delantero Lucas Alario que fichó por el Eintracht.
Las cifras del Leverkusen -8.5 millones de ingresos y 13 millones en gastos- son más modestas que las de los equipos anteriores.