En UFC 322, Valentina Shevchenko sorprendió de nuevo con una actuación dominante ante Zhang Weili, defendiendo con autoridad su cinturón de peso mosca. A lo largo de los cinco asaltos mostró una clara superioridad: combinó poderosos golpes al cuerpo, derribos precisos y control absoluto en el suelo para neutralizar los intentos de contraataque de Zhang.
La defensa fue un shutout: los tres jueces le dieron puntuaciones de 50-45, lo que refleja lo unánime que fue su dominio. Durante el combate, Shevchenko consiguió cinco derribos en seis intentos y controló más de 13 minutos del tiempo total de pelea, frente a apenas el medio minuto que tuvo Zhang con control posicional.
Con este triunfo, la luchadora kirguisa/peruana amplía su leyenda: suma ya once victorias en peleas por el título, un hito que reafirma su estatus como una de las más grandes del MMA femenino. Además, durante el combate alcanzó otro récord personal: se convirtió en la primera mujer en la UFC en lograr 60 derribos en su carrera. Al final de la pelea, Valentina Shevchenko se animó a regalar unos pasos de baile celebrando su victoria.
El público y los analistas no tardaron en reaccionar, muchos celebrando su actuación como una demostración de maestría técnica, disciplina y versatilidad. Por si fuera poco, Shevchenko ya empezó a mencionar posibles rivales para su próximo combate: nombres como Natalia Silva, Erin Blanchfield o incluso Kayla Harrison han sido puestos sobre la mesa, lo que anticipa más batallas de alto nivel.