El 25 de noviembre de 2022, la WWE vivió uno de los momentos más icónicos de su historia reciente: el regreso de CM Punk.
Durante el evento Survivor Series: WarGames, el luchador hizo su inesperada aparición, desatando la euforia de los fanáticos que llevaban casi una década soñando con verlo de nuevo en un ring de WWE.
Aquella noche, su entrada resonó como una explosión de emociones, marcando un antes y un después en el entretenimiento deportivo. El momento fue tan electrizante que se convirtió en tendencia global, con fanáticos de todas partes compartiendo videos y publicaciones sobre el inesperado regreso del “Best in the World”.
UN RETORNO QUE PARECÍA IMPOSIBLE
La relación entre CM Punk y WWE era considerada irreparable desde su amarga salida en 2014. En aquel año, Phil Brooks, su nombre real, denunció en el podcast The Art of Wrestling los conflictos que lo llevaron a romper lazos con la empresa.
Según Punk, su descontento se debía al manejo de su personaje, la falta de oportunidades estelares a pesar de su popularidad, y problemas graves con el sistema médico de WWE, que casi le costaron la vida debido a una infección mal tratada.
El despido de Punk, ocurrido el mismo día de su boda con AJ Lee, exacerbó la tensión. Durante años, el luchador rechazó cualquier posibilidad de regresar a WWE, incluso calificándolo como algo que "nunca, jamás" ocurriría. Su paso por All Elite Wrestling (AEW) y otros proyectos reforzaron esta postura, haciendo que su retorno pareciera una fantasía inalcanzable para sus seguidores.
EL IMPACTO DE SU REGRESO EN SURVIVOR SERIES
El retorno de Punk no solo sorprendió a los fanáticos, sino que redefinió las expectativas del entretenimiento deportivo. En un evento donde ya se especulaban sorpresas, la aparición de CM Punk fue cuidadosamente orquestada. Su icónico tema de entrada, Cult of Personality, inundó el estadio, llevando a miles de fanáticos a gritar como nunca antes.
A lo largo de su carrera, Punk fue conocido por romper moldes, no solo en el cuadrilátero, sino también en su forma de enfrentar a la industria. Su regreso representó un cierre simbólico de una etapa llena de tensiones, pero también el inicio de un nuevo capítulo que promete seguir cautivando al universo WWE.