Uno de los luchadores que contribuyó a que Místico fuera el último 'boom' de la lucha libre fue sin duda su némesis Black Warrior, personaje que se ganó la admiración y respeto de los fanáticos al pancracio gracias a la rivalidad que forjó ante el ya mencionado Príncipe de Oro y Plata, pique profesional que duró aproximadamente seis años, ya que esta rivalidad inició a principios del año 2000 y culminó en el 2006 con una lucha de máscara contra máscara, donde Jesús Toral López perdió la incógnita.
A pesar de que el Consejo Mundial de Lucha Libre contaba con grandes figuras del pancracio como Atlantis, Último Guerrero, Tarzan Boy, Blue Panther, El Hijo del Perro Aguayo, Héctor Garza, Shocker, Dr. Wagner Jr, Negro Casas, Marco Corleone, Dos Caras Jr (Alberto El Patrón) etc, el aniversario 73 del CMLL fue protagonizado por estas estrellas en crecimiento, dando una lucha que pasó a la posteridad.
La noche del 29 de septiembre del 2006, la Arena México abrió sus puertas para esta función que fue de alarido, sobre todo el combate estelar, donde la Catedral de la Lucha Libre estuvo abarrotada.
La primera caída de este mano a mano fue breve, ya que el oriundo de Torreón, Coahuila doblegó a Místico con una de las llaves tradicionales del pancracio como La Tapatía rindiendo al hijo de Dr. Karonte, en tan solo tres minutos, por lo que el referí Rafa El Maya le levantó la mano a Black Warrior.
Para la segunda caída, el rudo le desgarró la máscara a Místico, dejando ver la mitad del rostro del técnico y comenzó a vapulear al Príncipe de Oro y Plata, quien empezó a sangrar de la frente, situación que no fue aprovechada por Black Warrior, ya que su exceso de confianza terminó por darle la reacción a Místico, quien comenzó a volar por los ángulos del cuadrilátero, hasta engancharlo y llevarlo a las espaldas planas para que Rafa Maya diera las tres palmadas y emparejar la lucha.
En la última caída, fue de alarido y desde que sonó el silbato, el hijo pródigo de Tepito tomó revancha y desgarró la máscara de Jesús Toral López y en un par de ocasiones estuvo a punto de terminar con la lucha, pero el de lagunero resultó un duro hueso de roer, pues luchó al tú por tú, hasta que 18 minutos después de un sin número de lances, llaves y contrallaves de ambos gladiadores, El Seminarista de los Ojos Blancos conseguía la victoria con la palanca celestial, la lleve que hizo inmortal, la mística. Black Warrior, se quitó la máscara rota y se la entregó a Místico.
ZZM