Sergio Ramos ha tomado la decisión de salir este mismo verano del Real Madrid. Según ha podido saber AS, el central, que tiene contrato hasta 2017 (acabaría con 31 años), está muy enfadado con los últimos acontecimientos que han sucedido en torno a su figura. Que el Madrid no haya salido a desmentir las informaciones que le situaban en la órbita de algún candidato a las elecciones del Barcelona ha sido la gota definitiva que ha colmado el vaso de su paciencia.
Ramos no quiere ser el quinto en salir por la puerta de atrás del club tras Del Bosque, Hierro, Raúl y casi con toda seguridad Casillas. El central siente que no se le ha valorado y ha tomado la decisión firme de salir del Madrid. Y para ello está dispuesto a irse a otro equipo cobrando exactamente lo mismo que en la entidad blanca: 6 millones netos. Para él, no es una cuestión de dinero. Hasta la fecha no había hecho ningún movimiento ni escuchado ninguna oferta, pero el hartazgo al que ha llegado le permitirá ahora escuchar a equipos de primera línea que buscan central como son el Manchester United, City y PSG.
El defensa estaba inmerso en un proceso de renovación con el Madrid en el que no le han gustado nada las informaciones que se han filtrado desde el club, que siempre le dejaban en mal lugar haciendo ver a la afición que el tema económico era una prioridad para él. La cláusula de rescisión de Ramos es de 200 millones. El jugador quiere negociar con el Madrid una bajada drástica de la misma para facilitar que la operación sea rentable para el club a costa de tener él un contrato peor del que podría conseguir si esperara dos años para salir libre.