El golfista castellonense Sergio García, con una ronda al par (70), ha salido mejor parado que el día anterior en la tercera jornada del Abierto de golf de Estados Unidos, que se disputa este fin de semana en el difícil y controvertido recorrido de Chambers Bay, cerca de Seattle.
García se había quedado prácticamente fuera de la competición el día anterior, hasta que un fallo en el último minuto del aficionado Nick Hardy cambió el corte para el fin de semana y devolvió la vida a los 15 golfistas que, como él, habían acumulado un resultado de cinco arriba, como el argentino Angel Cabrera y el colombiano Camilo Villegas.
El castellonense salió al campo a primera hora con los colores de la selección española, el nombre de sus padres en la bolsa y dispuesto a remontar puestos. Sin embargo, dos 'bogeys' y un triple desafortunado borraron de la tarjeta los cinco 'birdies' del día. "Ha sido una pena lo del triple cuando empezaba a recuperarme", dijo García a Efe.
García volvió a lidiar con la inconsistencia de los 'greenes' de Chambers Bay y no acabó de rematar los buenos golpes con el 'putter'. "Hay tres o cuatro 'greenes' muy buenos, pero hay otros que son como si jugaras la Champions en un campo de tierra", dijo a Efe en referencia a las incomprensibles condiciones de los variopintos 'greenes' de la 115 edición del US Open, muy criticados por la mayoría de golfistas y comentaristas.
Un tuit de García la tarde anterior, en el que dijo que "estos greenes son tan malos como parecen en la televisión", del que se han hecho eco autoridades del mundo del golf como el escocés Colin Montgomerie y el sudafricano Gary Player, despertó la animadversión del pequeño grupo de detractores habituales del castellonense. De hecho, los agentes de seguridad tuvieron que expulsar a dos espectadores que acosaron a García durante la tercera jornada.
"Mi intención no era tanto criticar, sino intentar que esto no se vuelva a repetir", dijo a Efe Sergio García acerca de unas condiciones que muchos consideran incompatibles con el Grande más exigente de la temporada.
Por si no fuera suficiente con sus inconsistencias y su diversidad botánica, "los 'greenes' ya empezaban a ponerse muy duros al final de la mañana y esta tarde va a ser interesante ver qué pasa", dijo García a Efe.
El viento empezaba a levantarse y el sol calentaba el campo a primera hora de la tarde en la costa noroeste de Estados Unidos, cuando todavía no habían salido a jugar la tercera ronda los estadounidenses Jordan Spieth y Patrick Reed, colíderes después de dos jornadas, con cinco golpes bajo el par y una ventaja provisional de diez golpes sobre Sergio García.