El peculiar Chambers Bay, links pegado a Seattle, sede del US Open, de hoyos movidos y greenes imperceptibles, ha indignado al mítico Gary Player. “Es el peor campo que he visto en mis 63 años como profesional. Es una tragedia, qué torneo tan desagradecido”, decía el Caballero Negro, ganador de nueve grandes, que atacaba al diseñador, Robert Trent Jones Jr: “El que lo creó debe tener una pierna más corta que otra. Encima es público. Un amateur aquí haría +40”.
La USGA (Federación Americana) siempre busca enclaves duros para su major, pero esta vez ha encontrado muchos detractores. Sergio García es otro: “Para mí es como jugar las finales de la NBA en un campo con agujeros, cuestas y canastas sin tablero”. Billy Horschel se quejó de “la lejanía de los espectadores”. Spieth, líder al cierre de esta edición, se refirió así al exigente hoyo 18, un controvertido par 4: “Te deja tonto”.