Germán Lanaro confía en repetir en Universidad Católica su buena campaña en Palestino. Para eso llegó, y también para soñar con un futuro llamado a La Roja. Y es que el argentino ya concretó los últimos detalles para su nacionalización. Todo está listo.
"Sólo falta el carnet. Los trámites están hechos", dice ilusionado el defensa. "Prefiero tomar las cosas con tranquilidad. Haciendo las cosas bien en Católica todo es más fácil. Estoy enfocado en lo que debo hacer, lo otro vendrá por añadidura", agrega.
Y eso que viene, primero es Unión La Calera este fin de semana. Luego la Copa Sudamericana. "Todavía no vemos partidos de Danubio. Primero está Calera, poner la cabeza cien por ciento en eso. Tomar cada partido como único y eso nos llevará a conseguir grandes logros. Ojalá que podamos hacer el juego que venimos trabajando".
Lanaro es consciente que van en buen camino, pero también sabe que el torneo es diferente a la Copa Chile. De todas formas la motivación y la confianza es alta. "Cumplimos un objetivo que era clasificar a la otra fase de la Copa Chile. Hay que estar concentrado y convencidos de que tenemos equipo para pelear los tres torneos. Creerse el cuento de que estamos en un equipo grande y que debemos pelear todos los frentes".
También tuvo palabras para la salida de Erick Pulgar. "Es un gran progreso para él. Es un chico con muchas ganas, mucho talento y ojalá que lo pueda desplegar en Italia". Sobre su reemplazante Marco Medel, agregó: "Le hace bien a un grupo que quiere pelear, que vengan jugadores de su calidad".
Para cerrar, el trasandino también tuvo palabras para la citación de Mario Salas al Tribunal de Disciplina. "Las declaraciones de Mario tampoco fueron desacertadas. Sólo queríamos tener un panorama mejor de lo que sería el campeonato".