Kristel Köbrich no pudo alcanzar un lugar en el podio de los 1.500 metros libres en el Mundial de Natación que se disputa en Kazán, Rusia. La nadadora chilena remató en el séptimo puesto de una final histórica, en la que estadounidense de 18 años, Katie Ledecky, volvió a pulverizar su récord del mundo para quedarse con el oro.
La nacional no pudo repetir el cuarto mejor tiempo con el que había logrado clasificarse el lunes (16:01:63) y ahora sólo marcó un crono de 16'06"55 que la dejó muy lejos de la disputa por un lugar en el podio.
La rápida carrera que plantó Katie Ledecky, que va encaminada a convertirse en leyenda en las largas distancias, dejó a todo el resto de las competidoras muy atrás. La norteamericana ya ha quebrado nueve récords del mundo en dos años y ahora estableció la marca de 15'25"48.
El segundo lugar fue para la neozelandesa Lauren Boyle (15'40"14), ganadora de la medalla de plata, y el bronce se lo llevó la húngara Boglarka Kapás (15'47"09).