Víctor Orta se ha despedido esta mañana como director deportivo del Elche. El madrileño, responsable de la confección de la plantilla con la que ha contado Fran Escribá esta temporada, ha asegurado que llegó hace un año al club porque le ofrecieron un proyecto de “estabilidad e independencia”, pero llegado a este punto “el motor de la ilusión, para mí, está vacío”.
Orta no ha desvelado a qué equipo se marchará. Ha sonado para los despachos de Hamburgo, Las Palmas y Depor, pero ha afirmado que “son sólo rumores porque ningún club ha tocado a mi puerta”. El técnico se ha quejado de los numerosos problemas que “desde el comienzo” tuvo en el conjunto ilicitano: “Todo empezó el 22 de agosto, cuando tuvo que sacar de la lista a tres jugadores porque no tenían ficha. Luego tuve que pedir que se aplazaran el sueldo el 12%”.
En su comparecencia, en la que ha estado acompañado por muchos trabajadores de la entidad, ha dirigido a sus críticas al anterior Consejo de Administración y, especialmente, hacia la figura de Toño García Hita, al que ha acusado de haber hablado con representantes de cara al pasado mercado de invierno y de haber negociado con representantes la posible llegada de otro entrenador “de forma cobarde” cuando el equipo estaba en puestos de descenso. Incluso, ha recordado que cuando terminó la campaña del ascenso “una persona muy importante del fútbol me contó que ofreció una comisión a un representante para que le buscaran equipo a Escribá”. “Sepulcre me lo confirmó luego todo”, añadió.