El Consejo de Administración del Elche dispone de diez días para saldar su deuda con jugadores y exjugadores de su plantilla y evitar un nuevo descenso administrativo, en esta ocasión a Segunda División B: el club debe hacer frente estos días a una deuda próxima a los siete millones de euros.
El club estaba convencido de que podría hacer frente a la deuda denunciada ante la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) con los ingresos de Primera, pero en el nuevo escenario ya no lo tiene tan seguro.
El descenso administrativo deja sin ayuda económica por pérdida de categoría al Elche, reduce los ingresos de televisión y supone un enorme impacto para la campaña de venta de abonos, que no termina de arrancar y que sólo ha registrado algo más de 1.200 ventas cuando la pasada campaña, a estas alturas, sumaba más de 15.000.
Además, la opción de vender jugadores importantes para recaudar dinero se desvanece, ya que hasta seis futbolistas importantes de su plantilla, Fayçal Fajr, Adrián González, David Lombán, Víctor Rodríguez, Pedro Mosquera y Cristian Herrera, quedan libres si un club de superior categoría logra igualar sus contratos.
La entidad ilicitana ha recibido denuncias de todos sus jugadores de la presente temporada, a los que adeuda cuatro mensualidades, así como las primas de permanencia de las dos últimas temporadas, por lo que también adeuda dinero a futbolistas que ya no están en la entidad.
Asimismo, la comisión social del Elche, colectivo formado por miembros de la Federación de Peñas y otras organizaciones de aficionados del club, ha pedido al consejo de administración que pague la deuda con los jugadores para garantizar la supervivencia de la entidad o, de lo contrario, dimita.
La Comisión Social, cuyos representantes se entrevistaron en junio con Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), ha definido como "varapalo por parte de tres estamentos diferentes" el que ha recibido el club a pesar de los intentos del consejo de administración de evitar la sanción. "Pedimos que el consejo garantice el pago inmediato a jugadores para que pueda asegurar la viabilidad de la institución independientemente de la categoría en la que milite o, de lo contrario, dimita y dé paso a una gestora", señala el colectivo en su nota.
Para la Comisión Social, esa gestora debería estar promovida por el ayuntamiento de Elche, que debería hacer "una llamada a la masa empresaria ilicitana" para capitalizar la entidad.