"Ha sido un buen día", dijo Alejandro Valverde en la meta de Mende. Su compañero Nairo Quintana intentó recortar distancias con Chris Froome, pero el británico volvió a demostrar que se encuentra en un gran estado de forma.
"No se ha podido quitar tiempo al líder, ya que vemos que Froome está fortísimo, que pone su ritmo y es muy difícil desbancarlo, pero hemos hecho muy buena etapa. Aunque ganar el Tour a día de hoy siga siendo complicado, vamos a continuar trabajando", explicó el corredor murciano.
Valverde sabe que su cometido sigue siendo ayudar a su jefe de filas (Nairo), pero tras una etapa en la que se ha acercado a solo 30" del ahora tercer clasificado, Tejay Van Garderen, también sueña con un posible podio que ya se le escapó el año pasado (4º).
"Hay una batalla por el podio muy buena y hay muchísima montaña por delante. Hoy hemos salido favorecidos, pero otros días podemos perder. Queda mucho Tour y por ahora lo importante es que Nairo pueda pelear por la victoria. Si yo me metiera en el cajón sería ‘la leche’, pero eso, de momento, sería mucho soñar”, aseguró el campeón de la Vuelta a España 2009.
Valverde también admitió que Alberto Contador le pidió un relevo en los últimos kilómetros, pero el ciclista del Movistar, con Nairo por delante, pensó en la clasificación.
"Esto es competición: él está haciendo su carrera, yo la mía y quien debía tirar era él"