El mediocampista alemán Joshua Kimmich, quien desde hace algunas semanas se convirtió en el centro de la polémica por su recelo a vacunarse contra la COVID-19, anunció recientemente su cambio de opinión luego de infectarse de la enfermedad y ser sancionado por su club, Bayern Múnich.
“Para mí era difícil hacer frente a mis miedos y recelos, por eso he estado tanto tiempo indeciso”, sostuvo el jugador de 26 años en declaraciones recogidas por la televisora pública alemana ZDF.
El futbolista se contagió de coronavirus en noviembre y, aunque superó la infección y finalizó el periodo de cuarentena el último jueves, quedará al margen de los entrenamientos con el resto de sus compañeros por lo menos hasta el 2022 por las posibles secuelas que le habría dejado la enfermedad, según informó el equipo.
Joshua Kimmich no jugará con su club hasta el 2022. Foto: Bayern Múnich
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Además, una serie de “infiltraciones leves pulmonares” le impiden al deportista retomar los trabajos, agregó una fuente desde la interna de la institución bávara, que previamente había anunciado una suspensión del salario a su centrocampista por todos los partidos en los que fuera baja a causa de su contagio.
Desde que dio positivo a la COVID-19, Kimmich se ha perdido cuatro encuentros de la Bundesliga y dos de la Champions League. Además, quedó fuera de la convocatoria de su selección para la fecha doble de las eliminatorias europeas que se disputó el mes pasado.
Con este cambio de postura para recibir la vacuna, el volante se suma a Serge Gnabry y Jamal Musiala, también integrantes de la plantilla del Bayern, quienes accedieran a vacunarse hace algunas semanas tras dejar atrás sus temores por ser inoculados.
Con información de EFE