Tras dos meses y medio de paralización en el fútbol debido a la pandemia mundial del coronavirus, Lionel Messi regresó a los entrenamientos con la mirada puesta en la reanudación de la competeencia de LaLiga española y la Champions League. Pero sus planes eran exactamente disputar la Copa América que se iba a disputar del 11 de junio a 11 de julio entre Argentina y Colombia.
"Retrasar la Copa América fue una enorme decepción, pero desde luego era normal y lo más lógico. La Copa iba a ser un gran acontecimiento para mí este año y tenía una ilusión muy grande de volver a jugarla. Fue duro cuando me enteré del aplazamiento, pero lo comprendí perfectamente", reconoció el astro argentino en un acto comercial con Adidas.
Messi iba a abanderar en 2020 a una Albiceleste que volvía a jugar un torneo de selecciones como local, con la gran ilusión de lograr su primer título con Argentina -medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008 aparte-, pero tendrá que conformarse con pelear por la Copa América en 2021.
Con el combinado de su país perdió la final del Mundial Brasil-2014 y las finales de Copa América Chile-2015 y Centenario-2016 que se disputó en Estados Unidos.
En la reciente Copa América de Brasil-2019, Argentina no pasó de semifinales tras sucumbir contra Brasil, que se llevaría el título días después a manos de Perú. (D)