La Liga Nacional de Futbol Americano (NFL) anunció que revisará si los Dlefines de Miami siguieron de forma correcta el protocolo de conmociones en el caso del mariscal de campo Matt Moore, tras el golpe que sufrió en el segundo cuarto del duelo contra Acereros de Pittsburgh.
Moore, quien suplió al lesionado Ryan Tannehill en el duelo contra Acereros por la ronda de comodines de la postemporada 2016, sufrió un potente impacto por parte del apoyador Bud Dupree hacia la mitad del segundo episodio, tras el cual quedó tendido en el campo durante algunos minutos.
De inmediato, el veterano de nueve temporadas fue revisado tanto por los servicios médicos del equipo como por un consultor independiente, que la Liga exige esté presente en cada encuentro para evaluar a los jugadores tras acciones en las que exista el riesgo de una conmoción.
Luego de la revisión, el jugador fue declarado apto para volver al campo y aunque, como lo especifican las reglas, recibió descanso en la siguiente jugada la dirigencia de la NFL considera que pudo haber sido demasiado pronto e investigará si se siguieron los pasos adecuados.
Al término del encuentro, Moore explicó, en conferencia de prensa, que "solo necesitaba un segundo" para recuperarse y aseveró que "fui revisado y me sentía bien, en realidad fue más mi quijada que cualquier otra cosa".
Pese a las dudas de la Liga, el egresado de la Estatal de Oregon reiteró que tras el golpe "me sentía bien, regresé (al campo) y estaba bien. Pero (Dupree) me pegó bastante bien".
Y aunque un par de errores cometidos por el pasador han despertado cuestionamientos, el entrenador en jefe de Delfines, Adam Gase, descartó que hayan sido consecuencia de una posible conmoción y consideró que fueron acciones normales de juego.
En "el balón suelto, él (Moore) vio al rival y nosotros reventamos su protección. Él lo vio venir, incluso regresó (a las laterales) y dijo que `debí haber aceptado la captura´".
En cuanto a la intercepción, Gase explicó que fue más mérito del defensivo, quien "hizo una gran jugada. (El contrario) estaba en la línea de golpeo, nosotros estábamos corriendo una ruta cruzada de 18 yardas y el tipo regresa volando y hace la intercepción".
Asimismo, explicó que cuando se enteró de que Moore iba a volver al emparrillado "empecé a hablar con él y estaba bien. Lo hicieron de acuerdo con la Liga, hicieron su trabajo, luego nuestros terapeutas y (Moore) aprobó todo".