Un lamentable hecho sucedió este domingo entre los Lakers y Pistons en duelo válido por la NBA. La franquicia de Los Ángeles visitaba el Little Caesars Arena y tenía un tiro libre a su favor a nueve minutos del tercer cuarto. Sin embargo, fue en ese momento cuando el juego pasó a un segundo plano.
¿Qué ocurrió? A LeBron James no le gustó cómo lo marcaba Isaiah Stewart y no dudó en propinarle un codazo en el rostro al pívot de la franquicia de Detroit, quien reaccionó al instante y fue a increparle su acción a la leyenda viva de la NBA.
A partir de ese momento, todo se descontroló. Los basquetbolistas de ambos equipos trataron de calmar a los jugadores, pero Stewart estaba con mucha bronca encima y parecía que nadie podía controlarlo. Los encargados de seguridad tuvieron que contenerlo entre cuatro personas.
Por su parte, a LeBron James lo rodearon otros guardias. Sin embargo, el pívot de Pistons no cedía y solo quería devolver la agresión a 'King James' debido a que su cara estaba ensangrentada. En más de una ocasión amagó con calmarse (apenas lo soltaban, volvía a buscar al de los Lakers).
Luego de varios minutos y tras un intenso esfuerzos de los encargados de seguridad y también con el apoyo de los demás basquetbolistas, se pudo llevar a los vestuarios a Stewart, quien estaba muy molesto y mortificado.
Finalmente, ambos deportistas fueron expulsados y se espera una dura sanción por parte de la organización. Cabe mencionar que, en sus 18 temporadas en la NBA, LeBron solo había sido expulsado en una ocasión. Lakers regresaron a casa con la victoria tras imponerse 121-116 sobre Detroit Pistons.