El español Rafael Nadal, número 1 mundial, inició la búsqueda de su undécimo título en el Masters 1000 de Montecarlo con una victoria muy tranquila, sobre el esloveno Aljaz Bedene por 6-1 y 6-3.
En los dos años anteriores (2016 y 2017), Nadal ha reinado en Montecarlo, en un torneo que convirtió en una cita talismán encadenando ocho títulos consecutivos, entre 2005 y 2012.
Es la primera gran cita de la temporada europea en arcilla, en la preparación para el gran sueño de la estrella española: conseguir un también undécimo título en Roland Garros, a principios de junio en París.
En Montecarlo, Nadal ha conseguido su victoria número 64 en 68 partidos y la undécima de manera consecutiva.
Nadal es el gran favorito de esta edición pese a su teórica falta de ritmo. Sus problemas en la pierna derecha, que arrastra desde octubre, le obligaron a una pausa de dos meses tras su abandono en los cuartos de final del Abierto de Australia.
Efectuó un regreso triunfal en la eliminatoria de Copa Davis que España ganó a Alemania, imponiéndose a Philipp Kohlschreiber y Alexander Zverev -N.4 mundial-, para que la 'Armada' pasara a semifinales.
En el partido ante Bedene, Nadal fue el dueño y señor, sin llegar nunca a tener problemas para ganar los puntos.
"Fue un debut prometedor. Pero todavía tengo trabajo por hacer y mucho esfuerzo para ser más ofensivo", estimó Nadal a la televisión Canal Plus Francia.
Nadal no tiene gran margen de error en Montecarlo si no quiere volver a ceder el liderato del ránking ATP al suizo Roger Federer.