Este miércoles la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) pidió al Chapecoense (club que perdió a su plantilla en un accidente aéreo) juegue la última jornada del campeonato brasilero.
Chapecoense debía jugar este fin de semana contra el Atlético Mineiro por la fecha trigésima octava, aunque fue aplazada una semana por el luto declarado de siete días.
Aunque el partido se calificó de intrascendente ya que ambos equipos se habían asegurado sus objetivos de cara a la próxima campaña.
Chapecó estaba matemáticamente clasificado para la Copa Sudamericana y el Mineiro, para la Copa Libertadores.
"Ese encuentro tiene que celebrarse, tiene que ser una gran fiesta", dijo el presidente de la CBF, Marco Polo del Nero, al presidente interino del Chapecoense, Ivan Tozzo, según declaró este último en una rueda de prensa.
Pero la CBF se ha comprometido a respetar la decisión que adopten el Chapecoense y el Mineiro.