Inika McPherson se robó los reflectores en el Mundial de Atletismo de Londres 2017, pues la deportista de 30 años cuenta con más de 30 tatuajes en su cuerpo; además, compite con la cabeza rasurada y el rostro con lo que parece pintura de guerra.
La texana, que tiene el récord internacional por ser la única competidora de su estatura (1,63 metros), es pareja de Regina George, quien es especialista en los 400 metros planos.
Uno de sus tatuajes más emblemáticos está dedicado a su madre, con la representación del icónico personaje 'Betty Boop', ya que cuando era niña veía esa caricatura.