Más de 200 pericos vieron el estreno en directo, este martes por la tarde en las Piscinas Municipales de Montjuïc, y miles podrán comprarlas ya desde el miércoles. Se trata de las nuevas camisetas del Espanyol, que habían despertado una tremenda expectación por el cambio de proveedor (Puma da paso a Joma) y que no defraudaron. Al menos en la espectacularidad del acto que sirvió para darlas a conocer.
Un grupo de 70 nadadoras del CN Kallípolis, comandadas por Anna Tarrés, fueron las encargadas de abrir el caluroso show, acompasando con sus movimientos sincronizados los acordes de ‘Els meus colors’, ‘Glòria als Herois’ y el himno del club en su versión rockera. Entre todas formaron el escudo del Espanyol con la lengua fuera, emblema de la campaña de renovación de socios “Saca la lengua”, y finalmente una de las ‘sirenas’ emergió del agua enfundada en la nueva camiseta.
La primera, blanquiazul, mantiene las bandas anchas, la ‘senyera’ en la parte trasera del cuello y, por ahora, la publicidad de Power8, en contra de lo anunciado el domingo por el presidente, Joan Collet. Las que se comercialicen en las tiendas del club, sin embargo, no lo llevarán. La segunda, roja como era de esperar, contiene un aliciente añadido: unos ribetes blanquiazules horizontales, a la altura del pecho, que homenajean claramente a aquella inolvidable vestimenta de la Copa UEFA 1987-88, en la que los pericos alcanzaron la final. Javi López, Kiko Casilla y Álvaro González fueron los encargados de presentarlas, junto a algunos jugadores del fútbol base, que también mostraron las de portero, entrenamiento y paseo.
Dos millones. “Más de 30 profesionales han trabajado en estas camisetas”, lanzó el director general de Joma, José Manuel López, a quien el vicepresidente del Espanyol, Rafael Entrena, comentó que “será un acuerdo muy fructífero y beneficioso para todos”.
En los tres años firmados, el Espanyol percibirá cerca de dos millones de euros. De momento, este martes ya lograron, en una piscina situada ante todo el ‘skyline’ de la ciudad, poner a Barcelona a sus pies.