Paola Pliego, esgrimista mexicana que se perdió los pasados Juegos Olímpicos de Río por un supuesto dopaje, fue exonerada de dicha falta por la Federación Internacional de Esgrima al concluir en un segundo estudio que la deportista no consumiera sustancias prohibidas.
Previo a la justa veraniega, Paola dio positivo en doping en unos exámenes realizados por los laboratorios de la Conade, resultando suspendida seis meses por ello y por lo cual no pudo representar a México en dicho evento.
En Conade niegan que sus laboratorios hayan fallado aunque la esgrimista ya vuela a territorio mexicano desde París para ofrecer una conferencia de prensa al respecto.
Esta exoneración aún no es del todo oficial, pues la Agencia Mundial Antidopaje (WADA por sus siglas en inglés) será quien emita el veredicto final.