Un empleado del ministerio de deportes bielorruso que marchó con una bandera rusa el miércoles en la ceremonia inaugural fue expulsado de los Juegos Paralímpicos de Río.
El Comité Paralímpico Internacional (CPI) informó que "el individuo fue rápidamente identificado durante la ceremonia como un invitado de la secretaria general bielorrusa, y que en primer lugar no debió ser parte del desfile".
El CPI suspendió a Rusia de los Paralímpicos debido al descubrimiento de un sistema de dopaje patrocinado por el estado.
Natalya Eismont, una portavoz del presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, indicó que no fue un gesto espontáneo y agregó que "estamos con los paralímpicos rusos".
Al igual que en los Olímpicos, los funcionarios paralímpicos dijeron que las manifestaciones políticas no son permitidas en los eventos deportivos.