A unas horas de que arrancara el encuentro de la fase de grupos para el hexagonal final de la Concacaf, aficionados salvadoreños recibieron de forma hostil a la selección mexicana de futbol.
Medios desde El Salvador reportan que aficionados apedrearon el autobús en el que se transportaba el Tri hacia el Cuscatlán; reportaron un botellazo y uno de los cristales del vehículo resultó dañado.
No es la primera vez que México es acreedor a este tipo de agresiones. Las visitas al Cuscatlán se tornan complicadas debido a la animadversión que despiertan los tricolores en los centroamericanos; el ‘infierno’ como se le conoce al Cuscatlán se ha ganado a pulso ese título ante la presión que imprime sobre la visita