Michel Temer, presidente interino de Brasil, encabezó la ceremonia en la que el fuego de la antorcha paralímpica de los Juegos de Río 2016 cobró vida a 12 de días de distancia de iniciar las competencias deportivas.
Temer entregó la antorcha al velocista paralímpico Yohansson Nascimento, quien se consagró con la medalla de oro en Londres 2012 en la prueba de 200 metros planos, y que además figura como uno de los favoritos para obsequiar una presea dorada a su país.
En dicha ceremonia, también se dieron cita el presidente del comité organizador de Río 2016, Carlos Arthur Nuzman, así como el ministro de deportes, Leonardo Picciani, y el presidente del comité paralímpico brasileño, Andrew Parsons.
"La experiencia de organizar los Juegos Olímpicos, los cuales fueron llamados por mucha gente como los mejores de la historia, garantiza que los Juegos Paralímpicos continuarán en la misma dirección", aseguró Nuzman.
Rumbo a la ceremonia de apertura, a celebrarse el 7 de septiembre, el relevo de la antorcha veraniega comenzará el 1 de septiembre, dentro del cual el fuego olímpico visitará las ciudades de Brasilia, Belém, Joinville, Natal y Sao Paulo.
Por su parte, Yohansson Nascimento señaló que la delegación local peleará por permanecer dentro de los cinco primeros lugares del medallero, con el objetivo de que competir en su país les brinde mayor probabilidad de éxito.
"Los atletas brasileños están entrenando duro. Nuestro objetivo es muy ambicioso pero hemos tenido el apoyo suficiente para llegar a él y estoy convencido de que lo vamos a lograr, además no tengo ninguna duda de que el himno de nuestro país se va a escuchar todos los días", sentenció.