El Tahuantinsuyo o el Imperio de los Incas es la cultura más conocida del Perú precolombino en todo el mundo y, por lo mismo que esta civilización no contaba con escritura tal y como la conocemos en occidente, esto ha facilitado el surgimiento de un sinnúmero de mitos, entre estos, uno de los más difundidos es que esta sociedad no sociedad agua, pero ¿Es esto cierto? Hoy vamos a conocer la verdad.
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¿Es verdad que los incas no bebían agua?
Y puede que esta afirmación pareciera una bastante "loca", pero esto fue completamente cierto y existe un libro que lo prueba, como es el caso de "La cocina de los Incas", escrito por Rosario Olivas Weston.
En este libro se toca esta controversia y se dice que, por ejemplo, el agua no la consumían en estado puro, a no ser que fuera para una obligación muy específica, pero ratifica que no era de consumo masivo, es decir, por las élites y el pueblo llano.
Lo que sí era de uso común era la chicha, la cual no solo se hacía de jora, sino de una serie de productos, como de oca, quinua, yuca o molle, por nombrar solo algunas. Sin embargo, a la llegada de los españoles al Tahuantinsuyo llamaron "chicha" de forma general a cada una de estas bebidas.
Sin embargo, los estudios comprueban que estas habrían tenido sus propios nombres, pero muchos de estos desconocidos hasta nuestros días, tal y como lo contó el youtuber de historia peruana 'La Biblioteca de Merlín'.
¿Quiénes y cuándo se consumía chicha en el imperio de los Incas?
Como dijimos líneas arriba, esta bebida no era exclusiva de la clase gobernante, sino también parte de la población en general organizada en ayllus. Sin embargo, su consumo, más allá del simple hecho de beber, también estaba íntegramente relacionado con los eventos sociales, pero también al status social de cada grupo, familia o panaca e, inclusive, con el género de cada persona.
En ese sentido, los estudios han determinado que los gobernantes la consumían públicamente en festividades religiosas, siempre en vasijas ceremoniales, mientras que el poblador de a pie también en estas celebraciones como en ocasiones más cotidianas.
Asimismo, después de cada jornada en el campo o cualquier actividad laboral, los hombres la bebían de forma regular, además de estar presentes en los trabajos comunitarios y mingas (trabajo comunitario en beneficio de la colectividad que tenía por objetivo, principalmente, realizar obras de infraestructura).