Aaron "Wheelz" Fotheringham es un atleta de 24 años de edad, y su disciplina es el skateboarding, pero lo que lo hace peculiar es el domino del deporte sobre su silla de ruedas.
Originario de las Vegas, Nevada, Aaron nació con un defecto congénito, conocido como espina bífida, un mal de la médula espinal que le impide el uso de sus piernas.
Sin embargo, para Fotheringham, el problema de su nacimiento no ha significado un impedimento para emprender y sentir la adrenalina de las rampas; desde los 8 años, Aaron comenzó su andar en los parques de skateboarding, siempre acompañado por su hermano mayor Brian, quien le dijo que para perder el miedo al asfalto debería caer en un 'quarter pipe'.
Al principio el temor invadió las entrañas de "Wheelz", y los golpes de sus comienzos han dejado cicatrices hasta hoy; no obstante, la perseverancia erigió sus ánimos y lo intentó de nuevo una y otra vez, 'pisando fuerte'.
Fotheringham utiliza un diseño personalizado de silla de ruedas; él mismo elabora la caja de las sillas, la cual la hace ligera; además, adiciona una suspensión en las cuatro ruedas.
Gracias a ello, Aaron es capaz de realizar un sin fin de trucos que los patinadores profesionales y usuarios de BMX pueden hacer, gracias a que la suspensión amortigua sus aterrizajes.
Fotheringham ha trabajado con diseños de la caja las sillas de ruedas para ayudar a refinar el aspecto de situaciones comunes en los parques, lo que resulta en una silla "prácticamente indestructible"
El resto es historia: " Fotheringham construyó toda su vida y una carrera en torno a la adrenalina; ahora, se encuentra en la cúspide como uno de los mejores 'freestyler' de silla de ruedas del mundo.