El conjunto txuri urdin tiene que remontar dos goles para clasificarse a cuartos de final de la Champions.
La Real Sociedad buscará este martes la gesta de superar los dos goles en contra y clasificarse para cuartos de final de la Liga de Campeones frente a un París Saint-Germain sacudido por el anuncio de salida de su gran estrella, el delantero Kylian Mbappé.
Cómo afectará al equipo galo la gestión de la salida de su jugador más importante de las últimas temporadas será clave para que los locales tengan opciones de dar la sorpresa y alcanzar los cuartos por vez primera desde que la competición lleva el nombre actual.
El conjunto txuri urdin está ante una gran oportunidad de darle la vuelta, no solo a la eliminatoria, sino a la mala racha de resultados que arrastra. Torres más altas han caído y a ello se aferran los realistas después de la gran fase de grupos firmada en la primera mitad de la temporada.
Las buenas noticias para creer en una posible remontada han aflorado a medida que han pasado los días desde la dura derrota en Sevilla (3-2), y es que ayer volvió a los entrenamientos con el grupo Aritz Elustondo, y este lunes ha hecho lo propio Ander Barrenetxea, una pieza fundamental en la creación ofensiva.
Por primera vez en mucho tiempo, si la convocatoria lo confirma, la lista de bajas será muy reducida, con tan solo tres lesionados: Álvaro Odriozola, Aihen Muñoz y Carlos Fernández. El entrenador de la Real, Imanol Alguacil, podrá contar con casi toda la artillería pesada en uno de los encuentros más importantes de la temporada.
Después de muchos meses, el técnico realista podrá alinear a su once titular de esta temporada, con el que fue capaz de maravillar a media Europa tras lograr el pase a los octavos de final como primeros en un grupo con Inter de Milán, Benfica y Salzburgo.
Las estadísticas no son las mejores para afrontar esta eliminatoria: desde que se conoce el torneo como "Liga de Campeones", la Real ha llegado dos veces a octavos de final con esta ocasión. En la 2003-04 fue eliminado curiosamente por un equipo francés, el Olympique Lyonnais.
El PSG llega con confianza por el resultado de la ida pero sin exceso, por la forma en la que se produjo, con una Real que le tuvo contra las cuerdas.
A imagen y semejanza de aquel duelo, el equipo de Luis Enrique está obteniendo mejores resultados que juego y el técnico español solo aspira a que, seguir adelante en la competición, le permita mejorar la imagen del conjunto.
Eso pasa por traerse de Anoeta la primera clasificación para cuartos de final de la Liga de Campeones en tres años y lograr así tiempo para progresar.
La gestión de la salida de Mbappé ha sacudido al club en las últimas semanas, con el entrenador dispuesto a sacar el máximo partido de la nueva situación.
Intocable hasta hace un par de semanas, ahora ha visto cercenado su tiempo de juego, por lo que el pasado sábado pidió explicaciones al técnico, que repite que está preparando al equipo para el "post-Kylian".
Luis Enrique no le dio garantías de titularidad, pero sí le dijo que pensaba servirse de su talento en los partidos clave de la temporada, empezando por el de este martes en San Sebastián, el primero del delantero en España desde que anunció que dejará el PSG.
Cada gesto, cada jugada, cada mirada al banquillo será seguida de cerca para tratar de analizar cómo pueden ser estos cuatro últimos meses de Mbappé en el club de su ciudad natal.
El técnico puede recuperar para el duelo también a su capitán, Marquinhos, lesionado frente al Nantes y ausente en los últimos duelos, lo que ha debilitado su línea defensiva ya dañada por la ausencia de Milan Skriniar y Presnel Kimpembe.
El resto de la plantilla está a disposición del entrenador español, que mantiene la duda en el centro del campo entre el español Fabian Ruiz y el uruguayo Manuel Ugarte, mientras que en el lateral izquierdo pueden entrar Lucas Hernández o Nuno Mendes.