Dos goles de Rodrygo y uno de Bellingham sirvieron para que el Real Madrid sumase los tres puntos en el estadio Nuevo Mirandilla frente al Cádiz (0-3) y sea líder de LaLiga, a la espera de lo que haga el Girona en su partido de este lunes ante el Athletic.
El Cádiz aguanta fuera de los puestos de descenso gracias los pinchazos de sus perseguidores. Además, los amarillos tienen pendiente un partido en Mallorca, que disputarán el próximo miércoles.
El Real Madrid impuso su calidad y pegada ante un animoso equipo gaditano que llegó con 0-1 al descanso, pero terminó cediendo ante el poderío blanco.
El entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, se vio obligado a un cambio de última hora dando entrada como titular a Rodrygo en lugar de Brahim, que, con problemas estomacales, se cayó del once anunciado minutos antes.
Sergio González, técnico del Cádiz, construyó su centro del campo con Álex Fernández y Rubén Alcaraz, al no poder contar con los mediocentros lesionados Kouamé, Escalante y Fede San Emeterio.
Comenzó bien el Cádiz, robando balones a un Real Madrid quizás algo despistado, pero que necesita muy poco para marcar. Así, tras dos llegadas locales con remates de Chris Ramos y Navarro, los blancos abrieron el marcador por medio de Rodrygo.
El brasileño recogió un balón sin dueño para abrirse hueco y enganchar un disparo ante el que nada pudo hacer Ledesma. Apenas habían transcurrido catorce minutos de juego y el Madrid había apagado los ánimos cadistas.
Con el paso de los minutos, el Cádiz intentó recuperarse del golpe para mantenerse en el partido. Su presión alta dificultaba la salida de balón madridista, pero el balance ofensivo amarillo era muy escaso. Por su parte, los blancos sacaban el máximo rendimiento a la única oportunidad de verdadero peligro que habían creado.
Lunin salvó el empate a los 38 minutos con una gran estirada para desviar un disparo lejano de Roger Martí.
Una larga conducción de Rodrygo, que encaraba como una bala la portería de Ledesma, fue abortada por la defensa gaditana al borde del descanso. Justo después, Kroos disparó demasiado alto. Buscaba el Real Madrid una renta mayor antes de marcharse a los vestuarios, pero sin encontrar de nuevo el acierto de Rodrygo para abrir el marcador.
Con un disparo desviado del delantero cadista Roger se echó el telón a una primera parte en la que decidió la pegada madridista.
La primera gran ocasión de gol tras el descanso fue para los de Ancelotti. De nuevo Rodrygo la protagonizó, pero no fue culminada por Joselu, que, creyendo estar en fuera de juego, dejó pasar el balón hasta que se perdió fuera con Ledesma ya superado.
El Cádiz movió primero sus piezas dando entrada al internacional venezolano Darwin Machís para dotar de más velocidad y disparo a su ataque, pero el que volvió a marcar fue el Real Madrid y de nuevo con el sello de Rodrygo.
Permitió el Cádiz una contra madridista en superioridad numérica que culminó el delantero brasileño rompiendo la defensa local para poner de nuevo un balón imposible a Ledesma.
Con el 0-2, Ancelotti sustituyó a Modric, que había rozado el gol con un disparo que pegó en un poste antes del segundo tanto blanco. El croata se marchó al banquillo con molestias musculares.
Poco después apareció de nuevo Rodrygo para asistir a Bellingham, que firmó un 0-3 que terminó de enterrar la ilusión por sumar del Cádiz.
Para colmo de sus males, el Cádiz perdió por lesión a su portero, Conan Ledesma, que tras varios minutos cojeando dejó el campo y entró en su lugar David Gil para afrontar el último cuarto de hora.
Con todo decidido, el ritmo decayó y sólo destacó en ataque un disparo del uruguayo Brian Ocampo, que entró para jugar los últimos minutos del choque tras superar una larga lesión.