Palmeiras es un grande de Brasil. No solo por contar con cerca de 15 millones de hinchas, lo que lo convierte en un club popular a nivel mundial, sino por los títulos que consiguió en su historia, su vigencia y su actualidad, que lo tiene como animador constante de la CONMEBOL Libertadores tras una década en la que sufrió dos descenso. ¿Cómo lo logró?
Hasta hace un par de años, el equipo paulista deambulaba por la intrascedencia y por la ignominia. Había sido campeón de América por primera vez en 1999 con Luiz Felipe Scolari y había perdido la final con Boca, por penales, en el 2000. Desde allí a esta actualidad gloriosa hubo un gran bache.
Si alguien pregunta cómo calificaríamos este casi cuarto de siglo para el Palmeiras, es bastante difícil la respuesta. El club pasó del éxtasis a la agonía y viceversa. Descendió por primera vez en 2002 después de haber alcanzado la gloria. Regresó al año siguiente, como suele pasar con los equipos importantes en el Brasileirao, y poco a poco regresó a la Libertadores.
Volvió a caer en 2013 y en 2014 regresó a Primera para empezar a torcer la historia. A nivel local fue campeón en 2016, 2018 y 2022. Y confirmó su momento en las CONMEBOL Libertadores que jugó, porque a partir de 2018 empezó a pelear todas.
El modelo Palmeiras
A nivel futbolístico, es cierto que el equipo logró todo su esplendor bajo la dirección técnica del portugués Abel Ferreira, que llegó en 2020 para ganar la CONMEBOL Libertadores y aún se mantiene en el cargo.
Pero el éxito no puede explicarse sin profundizar sobre el aspecto económico: Palmeiras pertenece al mercado más grande de Sudamérica, y además, junto a Flamengo, tienen los dos planteles más caros del continente. Buena parte de las virtudes de la gestión tiene nombre y apellido: Leila Pereira, quien hoy preside al Verdao y es la primera mujer en estar a cargo del club.
La "tía Leila", como le dicen en Brasil, viene inyectando dinero desde hace años a través de Crefisa, la institución crediticia que figura como auspiciante en la camiseta y que tiene activos valuados en hasta 5 mil millones de dólares según Forbes. Y si bien ella está a cargo de la empresa (perteneciente a su pareja, José Roberto Lamacchia) desde 2008 y la asociación entre el club y la institución se dio en 2015 (cuando empezó a figurar en la camiseta) no fue hasta 2018 que de verdad hubo una inyección económica transformadora. Tan transformadora fue que en diciembre de 2021 terminó con ella ganando las elecciones sin oposición en el club.
Y si hay forma tangible de observar ese flujo e inyección económica es a través del valor de los planteles. Desde 2018, el Verdao tiene el más caro o uno de los más caros de Brasil y de América. En esta edición, la nómina de futbolistas alcanza los 160 millones de euros de valuación. Boca, su próximo rival, llega apenas a los 60, todo según el sitio Transfermarkt.
Hay un dato elecuente: con la tía Leila, Palmeiras se convirtió en el único equipo de Sudamérica en tener su propio avión. ¿Cómo lo hizo? Fácil: Pereira invirtió su dinero en fundar su propia línea aérea y compró una aeronave para su club. Según se supo, no le costó nada al Palmeiras tener su propio transporte, pero su futuro está cada vez más atado al destino de su presidenta.
Y si bien parece un cuento de hadas la situación del club, los hinchas no están exentos de preocupaciones. En julio, los seguidores del Verdao se manifestaron en el Allianz Parque (recinto del club) contra la dirigencia pidiendo refuerzos, con una pancarta explícita: "Criado por los pobres, robado por los ricos", en referencia a la dirigencia del club.
Y en agosto, juntaron dinero para publicitar un pedido de refuerzos para el club en el Times Square de Nueva York. La razón fue sencilla: allí disfrutaba de sus vacaciones la presidenta. El video se hizo viral rápidamente.
Los hinchas de Palmeiras ???????? desbloquearon un nuevo nivel a la hora de pedir refuerzos: pagaron por utilizar la icónica pantalla del Times Square de Nueva York ¿Por qué? Para que lo viera Leila Pereira, presidenta del club, de vacaciones en La Gran Manzana.pic.twitter.com/I8KaIeuILv
— VarskySports (@VarskySports) August 3, 2023
Y si bien el dinero no es todo, hace un poco más que ayudar. Palmeiras tuvo una conjunción de sucesos que lo catapultaron al éxito. Primero encontró un entrenador y lo mantuvo, algo muy difícil de hacer en Brasil. Ferreira se sostuvo por la gran cantidad de títulos obtenidos en poco tiempo, lo que de forma natural genera ganancias. El dinero atrajo dinero y la política del club fue mantener a casi todo el plantel. Si vemos el equipo que volvió a levantar la CONMEBOL Libertadores después de 21 años en 2020, más de la mitad de los nombres se repiten.
Pero en el fondo todos saben que la luna de miel no durará para siempre, y apuntan a ampliar su proyecto. Pese a no tener un plantel repleto de juveniles o jugadores formados en el club, Palmeiras busca generar valor en dos sentidos, la compra (o recuperación) de jugadores y la inversión en su cantera. Su joya es Endrick, delantero zurdo de apenas 17 años que fue vendido en 60 millones de dólares al Real Madrid y alterna en el primer equipo del Verdao.
Al igual que varios, el futbolista fue captado a los 10 años por el equipo de scouting del club, en un trabajo que busca no desperdiciar el talento brasileño desperdigado por el territorio. Y por ahora se nutre de ese trabajo -aunque en el once titular no se note tanto- pero en su plantel multicampeón ya cuenta con ocho futbolistas que fueron formados en la institución.
El nudo del modelo es la economía: ¿qué otros clubes de América tienen el privilegio de mantener a sus equipos y entrenadores después de ser campeones? Muy pocos. Y en eso Palmeiras saca una ventaja abismal, porque hace tres o cuatro años que para hablar de cómo juega decimos lo mismo; que "es un equipo metedor" o "duro" o que "son ordenados y corren mucho". Porque el estilo de un motivador y táctico como Abel Ferreira se mantuvo, pero además la calidad y jerarquía del plantel fue creciendo con cada título y situación límite que le tocó afrontar.