Ayer desarrollé en un artículo los pros y contras de lo que muchos esperamos sea un largo recorrido para Dean Ambrose con el Campeonato Mundial de Peso Completo WWE. Entre las probabilidades ambiguas, señalé la que podía convertir a Ambrose en un mero instrumento de cara a la separación de marcas del próximo mes. La compañía necesitaba un revulsivo en relación a su campeón máximo, y este daría un vuelco a las audiencias atrayendo a más espectadores durante las próximas semanas.
Este argumento parece refutarse al conocer los ratings del pasado Raw, los mejores de los últimos dos meses (datos recogidos de ShowbuzzDaily). La edición del lunes 20 de junio fue seguida por una media de 3.467.000 espectadores, con un rating del 1.28. Números que representan un ascenso del 18 y 31 por ciento respectivamente, pues la anterior semana se quedaron en los 2.97 millones y un 0.98. Datos tan positivos no se registraban desde el primer show rojo post-WrestleMania 32.
Seth Rollins, Dean Ambrose y Roman Reigns en la pasada edición de Raw (20-06-2016) / WWE ©
Aquí están los ratings por horas:
Primera hora: 1.25 (3.420.000 espectadores)
Segunda hora: 1.34 (3.562.000 espectadores)
Tercera hora: 1.25 (3.420.000 espectadores)
Una estadística también positiva es que WWE logró mantener el interés durante las tres horas sin decaer en la última de ellas, algo que se venía repitiendo con frecuencia. Debe apuntarse que no contar con la competencia de los Playoffs de la NBA también ha ayudado a elevar los números. Aunque se trate de una inercia habitual tras un buen PPV, medio millón de seguidores es una cifra a tener en cuenta. Cierto, no hay que echar las campanas al vuelo, parece prudente esperar a la próxima semana, pero tampoco puede negarse la evidencia de que Ambrose ha supuesto un soplo de aire fresco.
Ni Seth Rollins ni Roman Reigns pudieron alzar los mediocres datos que durante los últimos dos años arrojan las audiencias. Sólo el último regreso de Brock Lesnar, en su tentativa por recuperar el Campeonato Mundial de Peso Completo WWE hace ahora un año, logró incrementar exponencialmente el interés de los espectadores. Esto no se mantuvo, ya que The Undertaker reapareció para torpedear el combate de Battleground 2015, y de nuevo regresaron al pozo de la mediocridad, pese al recurso siempre socorrido de John Cena y al desafortunado regreso de Sting. En diciembre pareció vislumbrarse una esperanza con las buenas cifras del Raw que coronó a Reigns, pero todo se diluyó a posteriori con el mal manejo del samoano.
Brock Lesnar regresa como próximo oponente de Seth Rollins por el Campeonato Mundial de Peso Completo WWE (Raw del 15-06-2015) / WWE ©
¿Será suficiente el carisma de Ambrose para mantener estos últimos números que hemos conocido? WWE querrá al menos, hacer un buen bookeo del personaje en pos de SummerSlam 2016, que ya señalamos aquí constituirá la WrestleMania del verano, con 4 horas de duración previstas. Con la Triple Amenaza de The Shield programada para Battleground 2016 ya aseguramos que al menos hasta julio la expectación se prolongará.