ENTREVISTA: “Buscaremos hablar con Adriana Lúcar e intentar traerla a la selección”
Respaldado por la dupla Ballón-Castillo, Christian se posicionó más como un media punta, cerca a Hernán Barcos, para ser más un finalizador que organizador. En los primeros minutos se mostró más, generó faltas e incluso en una jugada dejó solo con una gran pase en cortada a Franco Zanelatto que no pudo concretar la magnífica jugada del ‘23′.
El paso de los minutos, con el marcador 1-1 gracias a los goles de Jesús Castillo para Alianza y Oncoy para Binacional tras un error garrafal del portero Franco Saravia, se notó más en el volante ofensivo. Cueva se cansó y dejó de aparecer, se mostró poco y le costó crear con el balón en los pies. Su ímpetu le jugó una mala pasada e hizo que intente presionar algunas salidas en las que no era necesario y terminó agotándose.
Como en el inicio del partido, los primeros minutos del segundo tiempo volvieron a ser de Christian. Ya con la tranquilidad que generó el gol de Barcos, quien justamente definió tras un rebote que dejó el portero Enríquez ante un disparo del propio Cueva, ‘Aladino’ asistió a Bryan Reyna para el 3-1. Y apenas un minuto después generó el autogol de Edson Aubert.
A los 77′, Chicho Salas decidió sacarlo del campo y esta vez desde las tribunas cayeron aplausos y elogios. Ya no más críticas, ya no más pedidos de que mejore su rendimiento. Cueva tuvo su gran noche en Matute el día que ganó su primer título como blanquiazul. Y el hincha celebró porque estaban esperando justamente eso: ver brillar a Christian, aunque todos están de acuerdo que para su tope de rendimiento aunque hay margen.
***
[Interactúa con Deporte Total: dale clic al cuadrito que está al costado de los nombres de los jugadores y observa su mapa de calor en el partido]
ANÁLISIS: “En la Libertadores y Sudamericana se evidencia el pobre trabajo formativo en el Perú”
Hernán Barcos, la gran figura
Párrafo aparte para Hernán Barcos, la gran figura de la noche. El ‘Pirata’ reemplazó al suspendido Pablo Sabbag y convirtió un doblete que pudo ser triplete si no fuera por la locura cometida en el último gol, el de Pablo Lavandeira. Al final terminó con dos festejos, una asistencia, puntaje perfecto en la valoración de Deporte Total y el aplauso de los casi 30 mil hinchas que asistieron al estadio Alejandro Villanueva.
A los 88 minutos, el argentino fue derribado en el área. Tomó el balón, lo colocó en el punto blanco y, cuando todos pensaban que iba a rematar, decidió tocarla con la planta del pie para que Lavandeira atropelle desde atrás, le gane en fuerza a Romero, y anote el quinto gol de la noche. Al mismo estilo que Messi y Suárez con el Barcelona, Hernán y Pablo hicieron delirar a todos en Matute.
2021: 11 goles
2022: 18 goles
2023: 6 goles
-24 goles con derecha
-5 goles con izquierda
-6 goles de cabeza
-7 goles de penal
Fuente: @MarianoLopezV
:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/YJNY4HRTPJEANLAY5A4X7TST5Y.jpeg)
El análisis de los que también jugaron
De atrás hacia adelante. Franco Saravia no tuvo una noche acorde a sus compañeros. Cometió un error que significó el empate transitorio de Binacional. Después no tuvo mayor trabajo porque la saga defensiva, compuesta por Yordi Vilchez como lateral izquierdo, Carlos Zambrano y Santiago García como centrales, y Ricardo Lagos por izquierda.
Vilchez fue quizá el más afectado de todos con los ataques constantes por la banda de Andy Polar, pero el defensor no pasó mayores apuros. Zambrano recibió una tarjeta amarilla y quedó suspendido para el siguiente partido, mientras que García volvió a ser el pase de salida del equipo. Lagos sigue manteniendo su buen nivel y es el defensa que más se suma al ataque.
En el mediocampo, la dupla Ballón-Castillo es la que mantiene el equilibrio en el equipo. Mientras que Jesús corre a todo aquel que no vista con camiseta azul y blanco, Josepmir se encarga de tapar los espacios y cubrir las espaldas de sus compañeros.
:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/ZDAZLAUDUFBB3FGQEH6WQJ545E.jpeg)
Por las bandas, Bryan Reyna volvió a ser ese extremo desequilibrante y rápido que deja rivales apilados como si fueran conos. Su gol redondeó su gran partido. Al otro lado, Zanelatto tuvo un buen primer tiempo, con diagonales que tanto daño hacen a los defensores rivales. Pero fue cambiado al mediotiempo por una lesión.
Gabriel Costa y Jairo Concha ingresaron para sumar minutos en ese camino que tienen ambos en búsqueda de recuperar su mejor versión. Pablo Míguez reemplazó a Carlos Zambrano ya con el partido controlado por lo que no sufrió inconvenientes y Aldair Rodríguez entró a hacer lo suyo: desbordar, presionar y apoyar en defensa. Lavandeira puso la cereza del pastel con su gol.
Matute volvió a ser una fiesta. Vio nuevamente brillar a Hernán Barcos y le dio paso a Christian Cueva, el crack que todos esperan que la rompa. Alianza Lima celebra el Torneo Apertura, el primer título del año, y el sueño de conseguir el tricampeonato cada vez está más cerca.