Las filtraciones de 'Panamá Papers' beneficiarán los intereses de la Conmebol, una entidad que su presidente, el paraguayo Alejandro Domínguez, definió como 'víctima' de tramas de corrupción que tienen en la mira de la Justicia a varios de sus exdirectivos.
"Para nosotros es muy importante todo lo que salga. La Conmebol está pidiendo restitución, somos una entidad víctima de la situación. Cuanto más veamos que hay por reclamar legítimamente en Conmebol, lo estamos haciendo", dijo Domínguez durante una rueda de prensa.
"Todo lo que salga es de beneficio para nuestros intereses", añadió al aludir al escándalo surgido a raíz de la filtración de datos del bufete panameño a través de Wikileaks y el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ).
Los documentos revelados evidencian algún tipo de vínculo con sociedades inscritas en paraísos fiscales de Jefes de Estado y de Gobierno como el ruso Vladimir Putin y el argentino Mauricio Macri, así como allegados suyos, deportistas como Lionel Messi, exjugadores como Iván Zamorano, así como empresarios y artistas.
El paraguayo Nicolás Leoz, presidente de la Conmebol entre 1986 y 2013, es citado en las revelaciones que sugieren que recibió sobornos.
Según los documentos filtrados tras el ataque informático contra el bufete de abogados panameño Mossack Fonseca, la Conmebol presuntamente recibió 97 millones de dólares por los derechos de retransmisión televisiva de la Copa Libertadores entre 2008 y 2018.
Los papeles del bufete panameño también salpican a otros dirigentes del fútbol sudamericano, como el expresidente de Conmebol Eugenio Figueredo (2013-2014), en prisión preventiva en Montevideo acusado de cometer estafa y lavado de activos durante su gestión.
EFE
La caída de Mossack Fonseca por dentro