El Inter de Milán acabó con toda esperanza de milagro del Barcelona al imponerse con solvencia al Viktoria Plzen checo (4-0), al que dominó, pese a un inicio protagonizado por los nervios generados por la situación, con la suficiencia de un equipo clasificado merecidamente para los octavos de final de la Champions League en el 'grupo de la muerte'.
En un San Siro vestido de gala, no falló el Inter a su gran cita con la historia reciente del club, que se clasifica por segunda vez a los octavos de final en la última década, de manera consecutiva además, al tiempo que elimina matemáticamente al Barcelona de la Champions.
Henrikh Mkhitaryan anotó de cabeza para el estallido de los hichas italianos en el estadio San Siro. Luego Edin Dzeko anotó en dos oportunidades: el pimero de ellos llegó solo para anotar, mientras el segundo fue con un zurdazo.