La noticia que todos suponíamos se ha confirmado: Qatar 2022 será el último mundial de Lionel Messi con la Selección Argentina. El delantero tendrá un último baile en el Medio Oriente para hacerse con el único título que le falta a su leyenda. El final de un cuento imperfecto que empezó en Alemania 2006.
La carrera del capitán argentino ha sido una montaña rusa durante todos estos años. Casi siempre con dos caras: indiscutible en Barcelona y cuestionado en Argentina.
Ahora vemos un Messi feliz, un Messi que sonríe y disfruta. Un Messi aclamado por millones de argentinos que sueñan con volver a ser campeones del mundo de la mano del mejor jugador de la historia. Con 19 partidos en los Mundiales hoy haremos un repaso por las Copas del Mundo en los que el ‘10′ ha participado en un sube y baja de emociones a través de los años.
Alemania 2006: eliminación desde la banca
Argentina llegó a la Copa del Mundo en el 2006 con José Pékerman como su director técnico. Un joven Messi, de 18 años, portaba la camiseta ‘19′ y pugnaba por un lugar entre experimentados jugadores como Carlos Tévez y Juan Román Riquelme. La ‘Albiceleste’ en el Grupo C tenía por delante una dura fase de grupos ante selecciones de gran nivel.
Leo, que no jugaría el primer encuentro ante Costa de Marfil, haría su debut mundialista frente a Serbia y Montenegro. Partido en el que entraría en el segundo tiempo en lugar de Maxi Rodríguez para jugar los últimos 15 minutos. En ese poco tiempo Messi dio una asistencia a Hernán Crespo que terminó en gol y sentenciaría el partido con otro tanto para poner el 6 a 0. Se convirtió así en el jugador argentino más joven en anotar en una Copa del Mundo.
De ahí fue titular en el empate a 0 ante Países Bajos para que Argentina sellará su pase a la siguiente etapa. En octavos, la ‘Albiceleste’ se enfrentó a México en un duro encuentro. Messi entró a los 84 minutos y anotó un gol en los descuentos que le hubiera dado la victoria al equipo de no ser anulado por el juez de línea. Argentina jugó la prórroga y paso a cuartos.
Ante el anfitrión, Messi vería el partido desde el banquillo sin la posibilidad de ayudar a su selección. El combinado argentino caería en penales y Alemania pasaría a semifinales. La ausencia de Leo en este encuentro fue muy criticada, lo que llevó a que Pékerman a renunciar en la conferencia de prensa posterior al partido. Messi cerró así su primera Copa del Mundo.
Sudáfrica 2010: la guía de Maradona
Con grandes expectativas, Messi disputó su segundo mundial esta vez en Sudáfrica. El delantero argentino se había consagrado en el Barcelona de Guardiola con el triplete soñado (Liga, Copa y Champions), y todas las miradas estaban en él. Esta Copa era todavía más especial porque Maradona dirigía al equipo y la ilusión de ver a la leyenda con su sucesor juntos en la cita mundialista era más grande que nunca.
Argentina cayó en el grupo B donde se enfrentó a Nigeria, Corea del Sur y Grecia. Partidos que ganó sin problemas para quedar como primero de grupo. En el último encuentro ante la ausencia de Mascherano en la cancha, Maradona le dio la cinta de capitán a un Lionel de 22 años. Es el futbolista argentino más joven en recibir tamaño honor.
Por tercera vez en la historia de los mundiales y segunda vez consecutiva, Argentina y México se verían las caras en los octavos de final. Con una gran contundencia el equipo de Maradona vencería por 3-1 y firmaría su pase a los cuartos de final donde una vez más los esperaba Alemania. Poco pudo hacer el conjunto albiceleste ante el poderío alemán que a los tres minutos de juego se puso adelante en el marcador. Pese a que el seleccionado argentino mejoró en la cancha, la contundencia de Alemania inclinó la balanza. La Argentina de Maradona se despedía de la Copa con un 4 a 0 y Messi regresaba a Barcelona sin goles en el torneo y en medio de duras críticas.
Brasil 2014: a un paso de la gloria
En el tercer Mundial de su carrera, Messi llegó a Brasil con grandes aspiraciones. Ahora con Sabella como cabeza del equipo, Argentina jugó la primera etapa en el grupo F con el capitán argentino como una de las estrellas con cuatro goles a Bosnia y Herzegovina, Irán y Nigeria. Con un puntaje perfecto, la ‘Albiceleste’ pisó los octavos de final para enfrentarse a Suiza.
Tras un empate en los 90 minutos reglamentarios, los argentinos sellaron su pase a cuartos con un gol de Di María y un gran Messi, que tendría el reto de superar la fase que se le había negado dos veces antes. Ante Bélgica el engranaje perfecto argentino siguió su curso y ganaron el encuentro por 1 a 0, logrando una clasificación a semifinales luego de 24 años de ausencia.
El partido contra Países Bajos fue extremadamente conplicado para Argentina, un partido que implicó mucho desgaste en la cancha que terminó en penales. Con la cinta de capitán, Messi tomó el balón y anotó el primer tanto para darle confianza al equipo que sellaría un histórico pase a la ansiada final. El sueño mundialista estaba más cerca que nunca.
Una vez más frente Alemania, ahora en el Maracaná, Argentina luchaba por la Copa del Mundo. Lionel Messi había sido figura durante todo el campeonato y la ilusión era enorme. Los minutos pasaban y el gol no llegaba. Tras un primer tiempo tenso, inició la segunda mitad y el argentino tendría una gran chance de gol ante Neuer que no entraría por poco. Su mochila comenzó a hacerse enorme.
Ya en el tiempo suplementario el cansancio era notorio, cuando parecía que los penales eran inevitables, Mario Gotze apareció y anotó el gol ganador a los 113 minutos para darle a Alemania una nueva Copa. Así vimos una de las imágenes más tristes del fútbol, un Messi entre lágrimas que se despedía del sueño mundialista y de su oportunidad de darle a su país la tercera copa del mundo.
Rusia 2018: eliminado por Mbappé
Con una gran carga sobre la espalda, el ‘10′ argentino llegó a su cuarto mundial. Con cinco balones de oro y ganándolo todo en el Barcelona, los ojos del mundo recaían sobre Messi a la espera de verlo brillar en su selección. Argentina arribaba a Rusia con muchas dudas alrededor, tras una eliminatoria lejos de su mejor versión, quedando tercero por detrás de Brasil y Uruguay.
Con Sampoli como entrenador del equipo, la idea de juego era clara: darle los balones a Messi, pero ya en la cancha tal tarea no sería del todo sencilla. Los compañeros del delantero lo buscaban constantemente y al final la estrategia no funcionó. Argentina empató en su debut ante Islandia, donde el capitán erró un penal. Cayó 3-0 ante una fuerte Croacia y le ganó a Nigeria gracias a una definición soberbia de Leo.
Pese al poco juego el conjunto albiceleste llegaba a octavos como el segundo mejor de grupo para enfrentar a la que terminaría siendo campeona del mundo Francia. El partido fue muy complicado y los franceses comenzaron ganando. Un gran Mbappé con dos goles dejaría en claro que estaba listo para pelear con los más grandes y así fue. Messi nunca se encontró cómodo en la cancha, fue el segundo futbolista albiceleste que más pases recibió con 210, sólo detrás de Javier Mascherano y Argentina quedó eliminada. Lejos estaba la imagen de la selección que llegó a la final hace cuatro años. ¿Cómo continuará esta película en Qatar 2022? Lo sabremos pronto.