David Benavidez ha pedido, rogado, exigido y hasta amenazado, pero aún así el peleador de sangre mexicana no ha podido acercarse a negociar una pelea con el rey de los libra por libra, Saúl Canelo Álvarez.
Con elogios, críticas y hasta amenazas y burlas el invicto de 25 años se ha querido acercar, pero la respuesta sigue siendo la misma: el de Guadalajara no quiere enfrentar a peleadores tricolores. Incluso ha metido a los organismos para que intercedan por él.
Incluso al panorama se ha sumado su padre José Benavidez, quien ha gritado que Canelo le tiene miedo, que debería de enfrentarlo porque David ni mexicano es (pues nació en Arizona).
El último embate para acaparar esa atención llegó esta semana cuando José Benavidez – quien además es entrenador de David – señaló que lo que está haciendo Canelo es acaparar la fama y no querer soltarla para un compatriota.
"¿Por qué no pelea con David? Que le demuestre a la gente, a mí y nos calla la boca y le pega como él piensa que le puede pegar, ahí está el detalle, sabe que David le puede terminar y quitarle toda su fama y no le quiere soltar la fama a un mexicano", declaró a Izquierdazo.
David, quien, a pesar de su juventud, ha logrado tener un muy buen paso en el boxeo con un récord de 26-0 con 23 nocauts, lleva una amplia racha de nocauts seis al hilo, entre los que destacan el de David Lemieux, Roamer Angulo, Anthony Dirrell y J´Leon Love.
Por su parte, Canelo pondera la posibilidad de someterse a una operación en el puño que lo dejaría fuera casi un año para poder recuperarse de la lesión y aseguró que para poder definir su futuro esperará al duelo de noviembre entre el monarca Dmitry Bivol y el mexicano Gilberto Ramírez.
En caso de ganar Bivol, Canelo adelantó que ponderará una revancha, mientras que si gana Ramírez – otro peleador que también ha buscado por años un enfrentamiento con Álvarez – verá que otra cosa le depara el futuro.
DAO