Sergio Pérez ha hecho del segundo lugar su constante. El segundo puesto conseguido ayer en el Gran Premio de Bélgica no solamente significó su regreso a un podio después de tres carreras sin conseguirlo –la última vez fue en Silverstone– sino que también le ayudó a tomar el subliderato en el campeonato de pilotos de la Fórmula 1. Dos segundos lugares en una misma jornada.
Porque a pesar de esa arrancada complicada en Spa-Francorchamps, Checo recuperó el rumbo y tuvo una gran carrera que le permitió dejar atrás a Charles Leclerc en la clasificación, con cinco puntos de diferencia, con 191 puntos del mexicano contra 186 del monegasco.
Quedan ocho carreras por delante y Max Verstappen tiene todo el camino libre para repetir como campeón del mundo – la diferencia con su coequipero es de 93 unidades – pero es importante el hecho de que Checo haya recuperado la estabilidad para volver a competir por podios y que su aporte sea clave dentro de las necesidades de Red Bull, que le lleva 118 puntos a Ferrari en el campeonato de constructores.
Un crecimiento notable
Más allá de sus retiros en Canadá y Austria, además del lugar 18 en Bahréin, Checo ha tenido un mejor rendimiento en 2022, al conseguir seis segundos lugares: Australia, Imola, España, Azerbaiyán, Gran Bretaña y ayer, en Bélgica. Su mejor resultado ha sido el triunfo en Mónaco, mientras que el número de podios podría ser mayor, pues quedó cuarto en Arabia Saudita, Miami y Francia, además de un quinto puesto en Hungría.
Y es que el segundo lugar ya se hizo su lugar predilecto: antes de 2022, Checo solo había finalizado segundo en Malasia (su primer podio en Fórmula 1), Italia (ambas en 2012 con Sauber) y en Turquía en 2020 (con Racing Point). Este año, ya duplicó aquella cosecha de segundos puestos.
El desempeño de Pérez en su segundo año con los Toros Rojos ha sido mejor, con siete podios en 14 carreras. Es cierto que tuvo problemas con su auto y se vio reflejado en las carreras en Gilles Villeneuve y en Red Bull Ring, pero el piloto también ha tenido que valerse de su habilidad al volante para sobreponerse a estos problemas y dejar atrás a Leclerc en el campeonato de pilotos.
Directo a su mejor año
Desde ya podemos asegurar que será la temporada más sobresaliente de Checo en los más de 11 años que lleva en la categoría más importante del deporte motor. Ayer llegó a 191 puntos y ya dejó atrás las 190 unidades que consiguió en 2021, su primera campaña con los de Milton Keynes.
Sí, lo que le tomó cosechar en 22 carreras, ya lo superó en 14, con todavía ocho Grandes Premios por delante. Para dimensionar la trascendencia de esta temporada, debemos considerar que en 2021, Checo llevaba 118 puntos en el mismo número de carreras. Esta temporada lleva 73 puntos más y su mejor marca aún puede crecer.
Si nos ponemos a analizar, el máximo de puntos que se pudieron conseguir hasta el momento son 380, considerando los 25 puntos del triunfo, la vuelta rápida y los dos sprints clasificatorios (Imola y Austria), con hasta ocho puntos para el ganador. Con base en esto, Checo lleva el 50.26 por ciento de los puntos posibles hasta la fecha.
En 2021, Checo llevaba 118 de 370 puntos, es decir, el 31.89 por ciento de los puntos posibles en 14 carreras, incluidos dos sprints, que en 2021 otorgaron puntos solo al podio, con un máximo de tres unidades por el primer lugar. Y si tomamos las 22 carreras de 2021, Checo logró 190 de 581 puntos posibles, con una efectividad del 32.70 por ciento.
¿La proyección?
Checo promedia 13.64 puntos por Gran Premio. Si mantiene esa media (comparable con terceros y cuartos lugares), es posible que consiga 109 puntos, aproximadamente, por lo que su rendimiento final podría ser igual o cercano a los 300 puntos… pero en Fórmula 1 todo es incierto y no deberá abandonar en ninguna otra carrera.
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