La perseverancia es uno de sus pilares de Nicole, quien con 26 años sigue sorteando una serie de dificultades. No hay obstáculo, ni el económico, aspecto por el que suele padecer, que la mueva de su foco, el de seguir obteniendo logros para el país, como la medalla de oro en Valledupar 2022, en el inicio del ciclo olímpico rumbo a París 2024. “Estuve trabajando mentalmente estos dos años y he podido visualizar esa medalla de oro en estos Juegos Bolivarianos”, nos adelantó, en una charla exclusiva para Depor.
¿Cómo iniciaste en el salto con garrocha?
Bueno yo toda mi vida he sido deportista. Empecé a hacer gimnasia artística desde los cuatro años. Ya por el 2015 decidí dejar ese deporte competitivo y dedicarme a mis estudios. Mi esposo, que en ese momento era mi enamorado, practicaba 200 metros con vallas y yo lo acompañaba a entrenar. Ahí conocí a mi entrenador Abdel de la Torre que sabía que yo era gimnasta y me motivó a probar la prueba del salto con garrocha. Hice una prueba y salió que estaba a 10 centímetros del récord nacional en ese momento, entonces ahí tomé la decisión de dedicarme a tiempo completo en esta disciplina, allá por el 2016.
Cuando decidiste hacer el cambio al salto con garrocha, ¿te imaginaste obtener tantos logros de manera rápida?
La verdad que no, yo había dejado el deporte competitivo completamente y se fue dando de a poco esta prueba. Tengo bastantes años de fortalecimiento en el tema de la gimnasia porque al principio me costaba creerme que yo en tan solo un año o dos años de entrenamientos ya rompía récords, pero conversando con mi entrenador me dijo que han sido los años de la gimnasia que me han ayudado.
Tu deporte es uno de los más difíciles para practicar en casa, ¿cómo lo sobrellevaste durante la pandemia?
Sí, muy difícil entrenar en casa, pero lo que más me faltó fue la motivación. Estaba con tantas ganas de ir a Tokio 2020 y ver que cada vez por la pandemia se cancelaban competencias, del no saber cuánto iba a durar, me afectó muchísimo en el tema psicológico y personal. Es más, me llevó recién, después de dos años de esos Juegos Olímpicos, volver a estar mentalmente fuerte para las competencias.
¿Sueles viajar constantemente a Alemania para una base de entrenamientos?
No mucho, más que todo para practicar. El IPD y la federación me apoyan con las instalaciones (locales), las garrochas. Eso lo agradezco mucho, pero no hay mucho apoyo con el tema de viajes a competencias o preparaciones en estos últimos años. A raíz que yo quería clasificar a Tokio 2020 y la pandemia estaba muy fuerte en Perú, decidí irme a Alemania. Yo tengo nacionalidad alemana, entonces opté ese recurso para poder clasificar a los Juegos Olímpicos. Lamentablemente cuando llego a Europa los casos empezaron a subir a la semana y cancelaron todas las competencias, entonces era un tema de frustraciones y me regresé a Perú, para colmo me dio COVID-19 y de ahí físicamente me costó retomarlo, pero sobre todo me costó retomar mentalmente.
Ya con la medalla de otro en el cuello, ¿qué pensamientos se te venían a la cabeza previos a la competencia?
Las cinco que competíamos teníamos marcas muy similares este año, en realidad era una pelea para cualquiera. Yo sé que tenía esperanzas de saltar más, pero lo que considero que me faltó fueran competencias previas. Fue mi primera competencia del año, sin contar los controles, pero en Lima los controles son un poquito sola, no se genera mucha adrenalina, lo que más ayuda a un atleta a prepararse es tener competencias de alto nivel, pero, lamentablemente no había presupuesto.
En cuanto al tema económica, ¿la culpa recae directamente en la federación?
No estoy segura, sé que la Federación no tiene presupuesto y me parece que va de parte del IPD, pero te mentiría al saber cómo lo están manejando. Lo único que sé que no me aprobaron el presupuesto para mis viajes competitivos.
Lamentablemente no se pudo ir a Tokio, pero ¿pelearás el puesto a París 2024?
La verdad después del proceso duro a raíz de Tokio 2020, he decidido enfocarme más en los objetivos de corto plazo. Uno nunca sabe cómo va el apoyo, porque ser garrochista es muy costoso. Una cosa sería conseguir de repente algún auspiciador que me pueda ayudar con un viaje, pero como transporto mis garrochas, el alojamiento, la logística es más caro y complicado. Yo he decidido enfocarme en el paso a paso para luego pensar en París 2024.
¿Cuál es tu marca actual?
4.25 metros, pero en la página de Federación de Atletismo no lo han actualizado.
¿Cómo ves el desarrollo del salto con garrocha a comparación de otras disciplinas en atletismo?
Bueno en realidad en marcha y fondo hay mucha gente que compite y tienen mejores resultados, por lo tanto, hay más apoyo. Ese es un problema que tenemos en el Perú, que esperan que tengamos resultados para apoyarnos. El salto con garrocha no es una prueba muy desarrollada, incluso en Sudamérica somo muy pocas, entonces, esto no incluye en la metodología del Apoyo al Deportista, porque para que una medalla sea válida en el apoyo al deportista (programa del IPD), deben haber más de cinco países compitiendo, y lograr esto es muy difícil por lo mencionado.
¿Cuál es tu mayor motivación?
Creo que motivaciones personales, superarme a mí misma cada vez. Desde que empecé apunté al récord nacional y aspiro seguir batiendo lo más posible que pueda, de ver qué tanto soy capaz de hacer.
Sabías que
- Además de dedicarse a mejorar su performance en el salto con garrocha, Nicole Hein tiene un emprendimiento propio y ello le permite tener flexibilidad con los horarios de entrenamiento. Motion Perú, es el nombre de su empresa, la cual importa vehículos eléctricos al país.
- Está casada con Javier McFarlane, también atleta y que logró oro en obstáculos de 110 metros en los Juegos Sudamericanos en 2014 y en los Campeonatos Sudamericanos 2015.
Recibe nuestro boletín de noticias: te enviaremos el mejor contenido deportivo, como siempre lo hace Depor.