Aún no pisaba suelo peruano ni se había calzado su nueva camiseta, mucho menos había gozado de minutos para demostrar lo que podía hacer dentro del campo; pero John Jairo Mosquera (Antioquía, 1988) ya era criticado por la hinchada que -se supone- debería apoyarlo. El juicio al que fue llevado sin aún cometer alguna falta hizo que su llegada a Sporting Cristal tambalee. Pero igual vino procedente del Always Ready de Bolivia arropado por Roberto Mosquera, el técnico que lo tuvo en el cuadro boliviano. Así arrancó el idilio entre el delantero y el cuadro rimenses: mal. Y acabó de la única manera que podía acabar: peor. El último viernes, el club anunció la rescisión del contrato del ‘9′ cinco meses después de haberlo anunciado y a falta de siete partidos para que acabe el Apertura.
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Cinco meses, 185 minutos en seis partidos (uno de titular) y ningún gol. Ese ha sido el saldo que dejó ‘JJ Mosquera’ en su breve paso por el fútbol peruano. El ‘9′ que en 2002, con 18 años y 288 días, debutó con Millonarios adueñándose del récord del futbolista más joven en tener minutos en la liga colombiana, hoy se despide de su decimocuarto equipo. El undécimo fuera de su país. Antes estuvo, por ejemplo, en el Werder Bremen de la Bundesliga, aunque la historia fue similar a la que vivió en el Rímac: jugó apenas tres partidos y se fue sin festejar.
“La decisión la tomamos ambas partes. Es verdad que el día a día marca. Si fichas a un jugador extranjero, el club y la hinchada espera mucho de él. John Jairo Mosquera es un gran profesional, él mostró inconformidad con su rendimiento deportivo”, señaló Juan José Luque, director deportivo del elenco celeste.
Mientras el nombre de Emanuel Herrera -el argentino quedó en la historia al marcar 42 goles en el 2018- está más presente que nunca, Mosquera prepara las maletas para irse del país sin pena ni gloria. Y su apellido es ahora parte del ranking que nadie quiere estar: el de los peores delanteros que llegaron al fútbol peruano. La lista es larga, pero aquí recordamos a algunos que dejaron “huella”, y no necesariamente por sus goles.
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