La Premier League anunció un total de 36 positivos de COVID-19 tras los test realizados la semana pasada, lo que supone un ligero descenso con respecto a los infectados en los siete días anteriores.
El calendario de la Premier League y de la FA Cup, los dos torneos principales en Inglaterra, se están viendo alterados por el fuerte repunte de los positivos en los últimos 15 días, relacionado con el descubrimiento de una nueva variante del virus en ese país mucho más contagiosa.
Eso ha llevado al gobierno británico a decretar un nuevo confinamiento general. Poco antes de este anunció, se informó de la suspensión del partido de la 18ª jornada de la Premier League entre el Aston Villa y el Tottenham previsto para el próximo miércoles, después de que 9 futbolistas y 5 miembros del cuerpo técnico del club de Birmingham diesen positivo al covid-19.
Los Villanos ya se habían visto obligados a jugar con un equipo de reservas el pasado viernes contra el Liverpool, correspondiente a los treintaidosavos de final de la FA Cup y que finalizó con la derrota del Aston Villa por 4-1.
La Premier League, que ha endurecido los protocolos de lucha contra el covid-19 de acuerdo con los 20 clubes de la máxima categoría, advirtió que se mostraría más severa con aquellos jugadores que se salten las reglas.
Pero también han comenzado a alzarse voces en contra se seguir jugando en esas condiciones.
“Financieramente es bueno seguir jugando, pero para mí, moralmente, es probablemente algo malo”, aseguró el viernes el entrenador del Newcastle Steve Bruce, cuyo club fue el primero en pedir el aplazamiento de un partido del campeonato y que tuvo que cerrar su centro de entrenamiento a comienzos de diciembre como consecuencia de los numerosos casos positivos en su plantel. (D)