Con la mayoría de su plantel infectado por el nuevo coronavirus, el club búlgaro Cherno More Varna no se rinde y este martes alineó a los jóvenes de su filial para intentar continuar luchando por clasificarse a la Europa League.
La formación de Varna, ciudad costera del mar Negro, ha sufrido la infección de 16 integrantes de su club por el coronavirus, entre ellos, el entrenador y el médico del club.
Un partido jugado la pasada semana parece estar detrás de esa ola de casos. Un jugador del equipo rival era portador del coronavirus pero no lo sabía, ya que el test efectuado la víspera había dado negativo. Ello hizo que infectara a al menos tres de sus compañeros de equipo.
El Cherno More Varna, pese a la oleada de casos en su plantel, no quiso causar baja en su partido del martes y, con el beneplácito de su Federación nacional, acudió con jugadores del filial a medirse al Arda Kardjali.
"Hemos reemplazados a los titulares por jóvenes del equipo B. Se efectuó un nuevo test en la víspera del partido", explicó el portavoz del club, Ivailo Borissov.
En Bulgaria se retomó el 5 de junio la liga de fútbol en estadios que se han reabierto al público. Según el Ministerio de Sanidad, las infecciones de jugadores no ponen en cuestión la presencia de público en la grada, pese a que el distanciamiento social no se guarda regularmente.
El Cherno More aspira a llegar al séptimo puesto de la liga búlgara para disputar unos repechajes en los que podría obtener el premio de clasificarse a la próxima Europa League. AFP