Los libros de historia sobre el fútbol ecuatoriano remarcan que el único clásico nacional es el choque entre Barcelona SC y Emelec. El primer juego lo disputaron el domingo 22 de agosto de 1943 en el recordado estadio Guayaquil (Ramón Unamuno) y tras varios duelos comenzó a despertar el interés y el morbo entre sus hinchas por cuál era el mejor equipo, y en medio de esta efervescencia popular EL UNIVERSO lo bautizó como el ‘Clásico del Astillero’ en su edición del miércoles 1 de septiembre de 1948.
En los últimos años esa pasión se degeneró al punto de provocar enfrentamientos entre hinchas y, por ello, el Ministerio del Interior y el de Deporte decidió que los clásicos se disputen sin hinchada visitante para evitar la violencia dentro y en los exteriores de los escenarios deportivos.
“Ahora ya no van los hinchas al estadio de Emelec que antes le llamábamos futbolín. Un idiota ha dicho que no debe ir la afición de Barcelona al estadio de Emelec y la hinchada de Emelec al Monumental, ¡es un absurdo!”, comentó el legendario directivo, que llevó a los amarillos a disputar su primera final de Copa Libertadores en 1990.
“Lógicamente, el clásico Barcelona vs. Liga de Quito es un Clásico Nacional, un clásico fantástico, pero yo me quedo con mi clásico Barcelona vs. Emelec… Las peleas que teníamos con Nassib Neme, pero eso era bueno, se llenaban los dos estadios”, agregó en un diálogo con la radio quiteña Área Deportiva.
También comentó: “Lógicamente, el clásico Barcelona vs. Liga de Quito es un clásico Nacional, un clásico fantástico, pero yo me quedo con mi clásico, Barcelona vs. Emelec… Las peleas que teníamos con Nassib Neme (a inicios de la década de los 90) llenaban los dos estadios (Monumental y Capwell)”. (D)